Así fue como el ‘Chapo’ Guzmán intervino en uno de los primeros pleitos entre ‘Los Chapitos’ y el ‘Mini Lic’

Con Joaquín ‘Chapo’ Guzmán en prisión, sus hijos mayores -Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar- se hicieron cargo del imperio de la droga llamado Cártel de Sinaloa. ‘Los Chapitos’ al principio no querían asumirse como responsables del negocio millonario de su padre, pero pronto habrían cambiado de opinión al conocer los millonarios ingresos que les dejaba el narcotráfico, revela la periodista Anabel Hernández García en su nuevo libro La historia secreta: AMLO y el Cártel de Sinaloa (Grijalbo, 2024).

“Con los millones de dólares obtenidos por el narcomenudeo nació la ambición desmedida de ‘Los Chapitos’. Pasaron de considerar abdicar al reino de su padre a quererlo todo. El ‘Mini Lic’ recuerda vívidamente cómo se desarrolló su apetito voraz”, se lee al inicio del Capítulo 4: Cómo se fraguó la pandemia del fentanilo, el cual recoge el testimonio de Dámaso López Serrano, hijo de Dámaso López Núñez ‘El Licenciado’, quien también fuera uno de los principales líderes del Cártel de Sinaloa y compadre del propio ‘Chapo’, pues fue padrino de bautizo de Emaly y María Joaquina, las hijas que el capo tuvo en 2011 con la modelo Emma Coronel.

El ‘Mini Lic’, hijo de quien se creía sería el heredero del imperio forjado por el ‘Chapo, contó a la periodista que los problemas con ‘Los Chapitos’ iniciaron en 2014, pues éstos controlaban Culiacán pero pronto quisieron expandirse ‘a la mala’ a ciudades que controlaban ‘Los Dámaso’ como Los Mochis y Mazatlán, y a Guamúchil, a cargo de Jorge Iván Gastélum ‘Cholo’, uno de los principales lugartenientes de Guzmán Loera.

“Comenzaron los problemas en 2014. ¿Por qué? Porque no nomás agarraron narcomenudeo. Empezaron las maquinitas tragamonedas, que les pones cinco pesos, 20 pesos, 50 pesos. Cigarros piratas también. Comenzaron a cobrar cuota a la prostitución. La venta de películas DVD piratas, o sea, todo de lo que hubiera forma de sacar provecho. Robo de gasolina también. Entonces ya no ganaban cinco millones a la semana. ¡Ganaban mucho, mucho, mucho! Y se quisieron meter a las zonas de nosotros”, relató López Serrano.

La irrupción de ‘Los Chapitos’ en terruños de ‘Los Dámaso’ molestó mucho al ‘Mini Lic’ y decidió encarar a Iván Archivaldo cuando metió tragamonedas en sus zonas con el permiso de su propio padre, ‘El Licenciado’:

“Mi apá a todo les decía que sí. Yo le dije: ‘¡No, olvídate! Esos son territorios de nosotros’. Iván dijo ‘No, pero… ¡No!’ (...) Lo hicieron de todas formas, pusieron maquinitas en los terrenos de nosotros. Yo yo las quité. Mandé camionetas, y llenas, y así… tres mil maquinitas, dos mil… ¡Las quité todas! Y me mandaron gente armada, no a mí, sino a mis pistoleros”, cuenta Dámaso López Serrano, quien de todos modos ya había previsto que sus socios tendrían una reacción violenta e instruyó antes a su gente para que defendiera su territorio si notaban la presencia de hombres armados de los Guzmán.

Este primer encontronazo llegó a los oídos del ‘Chapo’ Guzmán, quien en ese momento se encontraba preso en el penal de máxima seguridad del Altiplano, en Almoloya, Estado de México. Entonces se comunicó con el ‘Mini Lic’ de quien había sido padrino de bodas y le pidió por favor que devolviera las máquinas a sus hijos pues no eran de ellos sino de personas que les pagaban renta o ‘derecho de piso’.

El hijo de ‘El Licenciado’ se dejó convencer por su padrino y devolvió lo incautado, no sin antes advertirle a Iván que no se metiera otra vez en sus territorios. Pero éste hizo caso omiso y pronto metió sus cigarros pirata, por lo que López Serrano le dijo “Yo a ti te conozco, sé como eres. Mi apá te da la chanza, yo no. No vas a entrar. Carro que entre te lo voy a reventar”.

Pronto ‘Los Chapitos’ metieron el narcomenudeo a los territorios de Dámaso y su hijo. Amenazaron a los vendedores de droga y los obligaron sólo a vender su producto, para después entregarle a ellos 80 por ciento de la ganancia y los pobladores sólo se quedaban con el 20 por ciento; entre los afectados, incluso había familia de Ismael ‘Mayo’ Zambada’ el otro líder del Cártel de Sinaloa, sólo que a éste no le molestó que los hijos del ‘Chapo’ vendieran droga localmente, “empezó a doblar las manos”, dijo el ‘Mini Lic’.

Dámaso Jr. le dijo a su padre que si Iván continuaba expandiéndose de esa forma, lo único que iba a ocurrir es que pasarían de ser socios a matarse entre ellos. Lo cual no tardó mucho en ocurrir, pues el 4 de febrero de 2017 se desató la guerra entre ambos bandos luego de un supuesto atentado contra ‘Los Chapitos’ y la gente del ‘Mayo’ Zambada que le atribuyeron a ‘Los Dámaso’, aunque estos se deslindaron, de acuerdo con un texto del fallecido periodista Javier Valdez publicado en Ríodoce el 20 de febrero.

“Ese mes estalló la guerra entre ‘Los Dámaso’ y ‘Los Chapitos’ (...) En realidad, no hubo nada que detonara esa guerra, pero lo que puedo decirte es que fue por envidia. Nos tenían envidia porque Iván ya había dicho en 2010 que quería matar a mi papá. ¡Desde 2010! Y antes de eso, en 2009, Iván decía que mi papá le robaba al ‘Chapo’. Entonces te digo, eso venía de mucho antes, son cosas que fueron acumulándose”, concluye el testimonio del ‘Mini Lic’ para el libro de Anabel Hernández.