Volantes firmados supuestamente por la Familia Michoacana fueron repartidos en tres alcaldías de la Ciudad de México en donde exigen a algunos negocios el pago de 3 mil pesos para que no les hagan daño.
De acuerdo con el periodista Antonio Nieto, los volantes fueron repartidos en negocios de las alcaldías de Iztapalapa, Tláhuac y Milpa Alta, al suroriente de la Ciudad de México.
“Ya llegamos a su colonia. No queremos hacerles daño a ustedes ni a sus clientes, ni hacer daño a sus negocios, sólo venimos a pedir su apoyo para continuar con el movimiento”, se lee en la hoja que fue dada a conocer por Nieto.
En el mensaje se asegura que al dar el dinero no se les volverá a molestar: “Les damos nuestra palabra como gente de Michoacán que somos”.
En el mensaje, que tiene como título “Piloncillo y Cascabel”, se pide que las personas envíen al correo lafamiliam2000@hotmail.com, el número de un retiro sin tarjeta y el banco para que estos extorsionadores puedan realizar el retiro en cualquier cajero.
Además, se les solicita a las personas que impriman el número que les envíen para tenerlo a la vista “por cualquier visita” que puedan llegar a hacer “y que sepan que ya cooperan para que nadie los vuelva a molestar”.
“En esta ocasión se les está pidiendo la cantidad de 3 mil pesos por única ocasión, pero tienen que hacerlo antes del martes 30 de abril, en caso de no recibir su correo y no hacer depósito, los visitarán y no será nada agradable para ustedes ni sus clientes que vienen a su negocio”, advierte el mensaje en donde dice que si no cumplen con los 3 mil pesos se les seguirá extorsionando.
Los extorsionadores pedían incluir en el correo el nombre del negocio y la dirección para quitarlos de la lista. “Espero que comprendan la importancia de este mensaje y no jugársela si es cierto o no, no se arriesguen”, se lee en la carta en donde se asegura que tienen “ojos en todos lados”.
Confirman presencia de la Familia Michoacana en CDMX
En febrero pasado, las autoridades capitalinas reconocieron la presencia de la organización criminal en la ciudad, luego de que individuos clave asociados a la Familia Michoacana y el Cártel de Sinaloa fueron arrestados en la CDMX.
Entre los capturados sobresalen figuras clave, como Alfredo “N”, alias El Padrino, señalado líder de un grupo delictivo perteneciente a la Familia Michoacana con operaciones en varias alcaldías de la Ciudad de México, y Ricardo “N”, también vinculado a la misma organización y quien, según las autoridades, maneja un grupo de sicarios y distribuidores de drogas y armas.
Asimismo, se destacó la detención de David Omar “N”, alias El Piwi, presunto miembro de la Unión Tepito, y Eduardo Felipe “N”, identificado con el Cártel de Sinaloa, encargado de actividades ilícitas relacionadas con la distribución de drogas y generación de violencia.
La captura de Alfredo “N” se realizó tras cateos en tres inmuebles en la alcaldía de Tláhuac, donde este presuntamente lideraba acciones criminales como la venta de drogas, extorsiones y homicidios, afectando a las alcaldías de Milpa Alta, Tláhuac e Iztapalapa.
“Aquí no se mete nada de bajo del tapete y a nada se le llama por un nombre que no es el que merece; la presencia de estos grupos en la Ciudad ha tenido distintas etapas a través de la historia”, resaltaron las autoridades durante la presentación del operativo.
“Tiene bajo su mando a un grupo de sicarios y distribuidores de droga y armamento”, se mencionó sobre Ricardo “N” en la rueda de prensa, en donde estuvo presente el titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), y Ulises Lara López, responsable actual de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, donde se hizo énfasis en su rol de conexión con otros grupos locales para establecer alianzas.
Uno de los aspectos significativos de estas operaciones es la confirmación de la presencia activa de estas organizaciones criminales en la Ciudad de México, algo que había sido objeto de especulación y análisis previo, incluso señalado en documentos filtrados por el grupo Guacamaya de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Aunque organizaciones como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) aparecían mencionadas, la confirmación explícita sobre la Familia Michoacana y el Cártel de Sinaloa refleja la complejidad del panorama criminal en la región.