En el segundo debate presidencial de cara a las elecciones del 2 de junio los candidatos Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez expusieron sus propuestas y criticaron a sus oponentes.
El evento, organizado por el Instituto Nacional Electoral (INE) y conducido por los experimentados moderadores Adriana Pérez Cañedo y Alejandro Cacho, se centró en “La ruta hacia el desarrollo de México”, tocando temas vitales como economía, empleo, inflación, infraestructura, pobreza, desigualdad, crisis climática y desarrollo sostenible.
Durante el debate, cada candidato tuvo la oportunidad de presentar sus planes y proyectos para enfrentar los desafíos que enfrenta México en cada uno de los temas mencionados. Además de exponer sus visiones, no se perdieron oportunidades para señalar las deficiencias o fallos percibidos en las propuestas de sus contrincantes, utilizando este espacio para diferenciar sus plataformas y enfoques ante los votantes.
Los moderadores Adriana Pérez Cañedo y Alejandro Cacho fueron parte central de los momentos memorables durante el debate, captando la atención de los usuarios en redes sociales. La manera en que dirigieron algunas de las dinámicas y sus intervenciones (o nulas participaciones) no sólo contribuyeron al desarrollo del debate, sino que también generaron una ola de memes y comentarios en plataformas digitales.
Los regaños a Xóchitl Gálvez
Uno de los momentos que marcó el debate fueron los “regaños” de la moderadora Adriana Pérez Cañedo a la candidata de la alianza Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez.
Durante el debate, la panista recibió tres llamadas de atención por parte de Pérez Cañedo debido a dos situaciones distintas: una por intentar ceder minutos de su tiempo a Claudia Sheinbaum, lo cual estaba prohibido, y dos por sacar carteles con mensajes directos a Sheinbaum en momentos que no le correspondía el uso de la palabra, contraviniendo así los acuerdos previos entre los partidos.
Gálvez exhibió carteles con la frase “Amiga date cuenta, Claudia miente” durante la exposición de Sheinbaum sobre temas de crecimiento económico, empleo e inflación, y desarrollo. Pérez Cañedo intervino para recordarle a Gálvez que la muestra de carteles sólo estaba permitida durante su turno para hablar.
La firmeza y claridad de Adriana Pérez Cañedo al hacer cumplir las reglas del debate fueron elogiadas por usuarios en redes sociales, quienes consideraron su labor como impecable y la posicionaron como una figura de autoridad y profesionalismo en el contexto de debates presidenciales en México.
La experiencia de Pérez Cañedo, quien ha liderado noticieros y participado en múltiples debates a lo largo de su carrera, consolida su reputación como una de las moderadoras más competentes del ámbito periodístico nacional.
Los usuarios destacaron la impecabilidad de su trabajo, señalando su capacidad para dirigir el debate con prudencia y sin buscar protagonismo, lo cual contribuyó a mantener el enfoque en los temas importantes.
Algunos de los comentarios fueron: “El trabajo de Adriana Pérez Cañedo, como moderadora es impecable. Con prudencia, sin protagonismos pero con el aplomo suficiente para guiar el debate”, “Adriana Pérez Cañedo es la mejor moderadora de debates presidenciales en México. No hay más”, y “Bien Adriana Pérez Cañedo mencionando la palabra prohibida: REFORMA FISCAL. Lo malo: cuando ya nadie tiene tiempo”.
La ausencia de Alejandro Cacho
Mientras que Adriana Pérez Cañedo fue elogiada por su liderazgo y manejo impecable del debate, Alejandro Cacho enfrentó críticas por su desempeño. Los usuarios en redes sociales señalaron que Cacho tuvo una participación mínima durante el evento, lo que lo llevó a pasar casi desapercibido en comparación con la presencia activa y decidida de su colega.
Además de la falta de protagonismo, se resaltó que las preguntas formuladas por Alejandro Cacho no fueron abordadas por los candidatos, dejando un vacío en el debate donde temas potencialmente relevantes no fueron discutidos.
Algunos de los comentarios reflejaron esta percepción de manera directa: “La cara de Alejandro Cacho representa a varios, se nota que ya se quiere ir y que está sufriendo con el #DebateINE”, y se cuestionó irónicamente “¿Alejandro Cacho ya se fue o le tomó al agua?”, en referencia al momento en el que Xóchitl Gálvez sacó una botella con agua que, según ella, era el agua contaminada que se suministra en la capital.
La añoranza de Denise Maerker
Para algunos espectadores, la participación de los moderadores Adriana Pérez Cañedo y Alejandro Cacho no logró satisfacer las expectativas, lo que llevó a la audiencia a expresar un particular deseo por haber tenido a Denise Maerker en ese rol.
A través de las redes sociales, numerosos internautas manifestaron su desilusión al no ver a Maerker moderando el debate, argumentando que ella representaba la mejor opción para este importante evento. Se destacó su actuación en debates anteriores, donde su desempeño fue considerado sobresaliente y digno de admiración.
La ausencia de Denise Maerker como moderadora en el debate presidencial provocó comentarios específicos entre los internautas, quienes expresaron su descontento y nostalgia por su participación: “Confirmen si todos extrañamos a Denise Maerker como moderadora”, se lamentó un usuario, destacando la sensación generalizada de deseo por su presencia.
Otro comentario reflejó insatisfacción con humor: “Me parece una falta de respeto que la cuarta candidata Denise Maerker no se haya presentado al segundo debate presidencial”, sugiriendo irónicamente su importancia crítica en tales eventos. Además, surgieron llamados a su autoridad periodística: “¿Dónde está Denise Maerker, para que venga a poner orden? #DebateINE #DeniseMaerker”, señalando la reputación de Maerker por su capacidad para manejar debates de manera efectiva.