Las ratas son sinónimo de suciedad, ruido, heces, chillidos; son animales desagradables para la convivencia habitual.
Estos roedores pueden representan un riesgo a la hora de propagar enfermedades y causar daños materiales en las propiedades.
Poner atención
Las ratas pueden sobrevivir comiendo una amplia variedad de alimentos. Al interior de una casa los roedores pueden hacer sus madrigueras en una variedad de lugares oscuros y poco accesibles, algunos de los más comunes son:
- Debajo de arbustos y plantas.
- En las raíces de árboles expuestas.
- Sótanos.
- Cimientos del piso.
- Lugares altos como techos o altillos.
- Cloacas.
También es importante poner atención a lo siguiente:
- Olores desagradables
- Muebles dañados.
- Sonidos de rasguños provenientes del techo, paredes o bajo el suelo.
- Comportamientos extraños de las mascotas.
- Excrementos cerca de la cocina (en forma de frijol).
- Cables o muebles roídos.
Sabías que... Las ratas saben nadar instintivamente, suelen nadar para conseguir alimentos y cruzar charcos. Duermen durante el día y están más activos durante la noche. Tienen 22 dientes y sus muelas no paran de crecer en toda su vida.
Su eliminación
En caso de detectar a estos molestos y desagradables roedores, toma en cuenta las siguientes sugerencias para su eliminación:
- Eliminar los recursos que necesitan para sobrevivir.
- Detectar sus nidos o madrigueras.
- Lavar el excremento y las huellas con cloro.
- Deshacerse del desorden.
- Mantener las áreas exteriores libres de maleza y basura.
- Control y saneamiento de los botes o depósitos de basura.
- Guardar la comida en recipientes cerrados.
- No dejar expuesto el alimento para animales.
- Sellar grietas y agujeros estructurales con cemento.
- Utilizar trampas con cebos.
Transmisores de enfermedades
Las ratas pueden ser portadoras de enfermedades peligrosas para los humanos como: Síndrome pulmonar por hantavirus, leptospirosis, coriomeningitis linfocítica, peste y tifus. Su contacto con alimentos y superficies puede propagar estas enfermedades.
La presencia de ratas en su hogar puede causar estrés y malestar emocional. Nadie quiere lidiar con la invasión de estos roedores.
También pueden ser portadores de varios parásitos, ectoparásitos, como pulgas, garrapatas, piojos y ácaros y bacterias, además de algunas enfermedades transmitidas por mosquitos.