Reconocido mundialmente por su trayectoria en el cine, el actor mexicano Mario Moreno, mejor conocido como Cantinflas, no solo dejó un legado en la industria cinematográfica sino también en el sector inmobiliario.
Su éxito en Hollywood y en México le permitió adquirir varias propiedades a lo largo y ancho del país, destacándose entre ellas una fastuosa mansión en Acapulco, Guerrero, referente de lujo y elegancia durante su tiempo, aunque el Huracán Otis le dio un drástico cambio a su aparecía.
Esta residencia, erigida en los años 50 por iniciativa del mismo Cantinflas, buscaba convertirse en un ícono de opulencia dentro del estado. El diseño incluía una piscina de grandes dimensiones, completada con un tobogán, que reflejaba el esplendor y la extravagancia de la época. El precio de esta impresionante casa rondó el millón de dólares, según información recogida por El Universal, evidenciando la magnitud de la fortuna que amasó el actor gracias a su carrera.
El interior de la mansión estaba a la altura de su exterior, con habitaciones y salas de estar ricamente decoradas. Moreno optó por adornar estos espacios con fotografías personales y obras de arte reconocidas, dándole un toque personal y culturalmente enriquecedor a la vivienda. Un detalle notable era su puerto privado, el cual contaba con una estatua del actor, dotando al lugar de un sello distintivo y personal.
La mansión no solo servía como refugio de lujo sino también como un escaparate del alcance que tenía Cantinflas más allá de las pantallas. Era uno de sus lugares predilectos para el descanso, en especial debido a la demanda de sus constantes viajes y proyectos.
No obstante, con el fallecimiento de Cantinflas en 1993, la propiedad ha experimentado un declive significativo. Hoy en día, la otrora lujosa residencia muestra signos de abandono y deterioro, perdiendo gran parte del esplendor que la caracterizó durante décadas.
Huracán Otis terminó de destruir la casa de Cantinflas en Acapulco
Aunque la propiedad del famoso de Cine de Oro ya estaba en total declive previo al arrollador paso del Huracán Otis por Acapulco, ahora solo son ruinas, pues ya ni el popular y famoso tobogán que tenía y se conservada, gracias a que estaba hecho de concreto, existe.
Sin embargo, su estatua que es una replica de él en uno de sus más clásicos personajes se mantiene de pie, sorprendiendo a más de uno en rede sociales, luego de que Los Vázquez compartieran con gran tristeza que la casa de Cantinflas en Acapulco ya es solo polvo.