Juan Carlos Reyes Félix, de 55 años, conocido ejidatario, cantante y empresario musical, fue trágicamente asesinado durante la tarde del 22 de abril, luego de que viajaba en la carretera federal tramo Xpujil-Chetumal en las cercanías del crucero al ejido 20 de Noviembre.
Según informes de Ecos Calakmul, Reyes Félix se dirigía en compañía de su esposa hacia Chetumal, en Quintana Roo, cuando fue interceptado y asesinado a quemarropa.
La situación se tornó aún más crítica al conocerse que la esposa del músico y empresario, quien lo acompañaba en el momento del atentado, fue gravemente herida y tuvo que ser trasladada de urgencia a las instalaciones del hospital IMSS-Bienestar, ubicados en Xpujil para recibir una pronta atención por parte de especialistas.
Este hecho subraya no solo la pérdida de una figura relevante para la música y la empresarial local, sino también el grave riesgo que implicó para su acompañante, que habría sido una víctima colateral, misma que se debate entre la vida y la muerte.
Xpujil, cabecera municipal del vasto territorio de Calakmul, se encuentra a casi cinco horas de la capital campechana y hace frontera con el estado de Quintana Roo, lo que resalta la relevancia regional de este suceso.
Con respecto al cadáver del músico, ya fue enviado hacia las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo) donde se le realizará su respectiva autopsia de ley, además de todos los protocolos de homicidio, sin conocerse más datos en cuanto al paradero de sus agresores.
El asesinato de Reyes Félix ha movilizado a las autoridades locales y federales en busca de respuestas y justicia. Elementos del Ejército Mexicano, la policía municipal de Calakmul y representantes de la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (FGE) llegaron al lugar de los hechos para iniciar las investigaciones pertinentes.
A pesar de estos esfuerzos, hasta el momento no se reportan detenciones ni se ha esclarecido la identidad de los perpetradores o los motivos detrás de este violento crimen.
La comunidad de Xpujil y el sector musical están convocados a seguir este caso de cerca, esperando prontas respuestas de las autoridades competentes. La violencia que se ciñe sobre figuras públicas y sus familiares pone de manifiesto la necesidad de reforzar las medidas de seguridad y justicia en regiones vulnerables.
Este trágico evento deja un vacío en el ámbito cultural y empresarial de la región, al tiempo que plantea interrogantes serias sobre la seguridad en las carreteras del sureste mexicano.