La icónica canción “De música ligera” del legendario grupo argentino Soda Stereo es la melodía más reproducida del conjunto, según Spotify, acumulando 302 millones 69 mil 444 escuchas. Este tema no solo se ha erigido como el himno indiscutible de la banda, sino que, curiosamente, su creación tuvo lugar en México.
Originaria del álbum “Canción Animal”, publicado como el quinto trabajo de estudio de la banda, “De música ligera” vio la luz como el primer sencillo de este disco. La génesis de sus primeros acordes se remonta a 1989, específicamente a una sesión de ensayo en la Plaza de Toros Calafia de Mexicali, previo a un concierto que el grupo ofrecería en ese mismo lugar.
La revelación de este dato vino de un diálogo entre Zeta Bosio, el bajista de la agrupación, y Adrián Taverna, responsable de los sonidos característicos de la banda, capturado en un video para el canal Soda Stereo Rock Hall. Durante esta conversación, Bosio inicialmente atribuyó erróneamente la creación de la canción a Morelia, pero Taverna corrigió el dato, señalando Mexicali como el lugar correcto.
Según se desprende de los ensayos de aquel día, la banda, incluyendo a su vocalista Gustavo Cerati, estuvo improvisando hasta alcanzar el sonido y ritmo distintivo que eventualmente se consolidaría como la versión final de “De música ligera”.
Este proceso fue detalladamente documentado por el periodista Rockaz en el periódico La Voz de la Frontera, quien afirmó haber sido testigo directo del hecho:
“Ese histórico día durante el ensayo general en la Calafia estuvieron improvisando hasta que lograron obtener el sonido y ritmo que dio como resultado lo que es la versión actual de Música Ligera, todo lo capté y quedó plasmado en mi publicación del periódico La Voz de la Frontera, nadie me lo contó, al igual que otros mexicalenses, yo estuve ahí”.
De Música Ligera, la historia del himno de Soda Stereo
“De música ligera”, Gustavo Cerati y Zeta Bosio, integrantes emblemáticos de Soda Stereo, concibieron uno de los sencillos más trascendentales en la historia del rock latinoamericano, mismo que se convirtió en el primer lanzamiento del quinto álbum de estudio de la banda, Canción animal, durante el primer semestre de 1990. Este tema no solo capturó el espíritu de una época, sino que también marcó un hito, consolidándose como un himno irrepetible en el vasto panorama musical latinoamericano.
La melodía sería después seleccionada como el acto de clausura de El Último Concierto de Soda Stereo, donde, en un emotivo adiós, Cerati agradeció a fans y colaboradores, culminando con sus icónicas palabras: “¡Gracias... Totales!”.
Dicho momento quedaría grabado en la memoria colectiva, simbolizando uno de los cierres más emotivos en el espectro del rock en español. Además de su valor sentimental, ha sido reconocida con múltiples honores, destacándose en diversos rankings que subrayan su valor artístico y su influencia en generaciones tanto de oyentes como de músicos.
Al Borde en 2006 la colocó en lo más alto de su lista, señalándola como la mejor canción de rock de Iberoamérica, mientras que E! en 2011 y Rolling Stone Argentina, junto a MTV en 2002, le otorgaron lugares estelares en sus respectivas clasificaciones.
El reconocimiento no se limitó solo al ámbito iberoamericano; Acclaimed Music destacó “De música ligera” a escala global, posicionándola entre las mejores composiciones de la década de los 90 y de 1990.
“De música ligera”, el emblemático tema de Soda Stereo, nació casi espontáneamente durante una prueba de sonido en un concierto en Mexicali, México, en 1989. De la fusión de cuatro acordes y palabras que surgían al calor del momento, Gustavo Cerati presintió inmediatamente su potencial para convertirse en un superhit, una predicción que el tiempo confirmó.
Las influencias para esta canción provienen de una mezcla de experiencias personales y musicales de Cerati, incluida una colección de discos familiares y su colaboración previa en el tema “Música lenta”.