Sin duda Teotihuacán es una de las zonas arqueológicas más importantes de México, una de las que más turistas recibe al año y también de las más estudiadas; sin embargo, a pesar de esto, aún son muchos los misterios que la rodean.
Esta ciudad antigua, fundada aproximadamente en el siglo I a.C., alcanzó su apogeo entre los siglos III y IV d.C., convirtiéndose en uno de los centros culturales y comerciales más significativos de la época.
Sin embargo, los registros indican que al rededor del año 550 d.C la ciudad comenzó a tener una notable disminución en su población, fenómeno que terminó con su abandono total, sin que hasta la fecha se hayan esclarecido en un 100% las casusa de este hecho.
Pero un estudio reciente publicado en la revista Journal of Archaeological Science: Reports parece dar nueva luz sobre el tema, al revelar que la causa del abandonó de la ciudad podría haber sido una serie de devastadores terremotos.
Y es que de acuerdo con los arqueólogos responsables de la investigación, en varios de sus recintos se identificó destrucción compatible con fuertes temblores de tierra. Algunos de estos daños están en la escalera oeste del Antiguo Templo de la Serpiente Emplumada y en las primeras filas de la escalera oeste de la plataforma Adosada del Templo Nuevo y en la Pirámide del Sol.
En total, los especialistas determinaron que podrían haber ocurrido hasta cinco terremotos antiguos distintos desde el período Tzacualli (1-100 d.C.) hasta el Xolalpan-Metepec (450-550 d.C.) y al menos dos de estos movimientos habrían sido superiores a 8.5 grados.
“Los megaterremotos repetitivos de la costa del Pacífico pueden ser responsables del patrón de daño a los edificios. Esta propuesta no entra en conflicto con otras teorías existentes sobre el colapso abrupto de Teotihuacán, considerando que la superposición repentina de desastres naturales pudo aumentar la tensión interna (levantamientos) y el malestar social”, escriben los expertos.
De acuerdo con la investigación, los sismos que provocaron fisuras en las estructuras, movimiento y giro de bloques de construcción, desmoronamiento de paredes y ruina de las partes altas de las edificaciones las cuales podrían haber influido en la transformación del estilo arquitectónico de Teotihuacán.
Esto llevó a la expansión de los principales edificios de carácter religioso y político, incluyendo las Pirámides del Sol y la Luna, así como a la restauración del Templo de la Serpiente Emplumada.
Si bien aún quedan muchas preguntas por responder, la paleosismología (estudio de los sismos del pasado) podría ser una rama que ayude a entender muchas de las cuestiones que se vivieron en el México antiguo, el cual, también padecía de los efectos de estos movimientos.
Cuál fue la importancia de Teotihuacán
Teotihuacán ejerció una influencia considerable en la región, tanto en términos culturales como religiosos, y sus artefactos y estilo artístico se encuentran dispersos por diversas áreas de Mesoamérica. La ciudad era un importante centro religioso, y se cree que sus grandes pirámides fueron dedicadas a deidades como el Sol y la Luna. A pesar de su importancia, los detalles sobre su gobierno, sistema social y vida cotidiana siguen siendo en gran parte desconocidos.
La ciudad experimentó un declive gradual y, para el siglo VII o VIII d.C., fue abandonada. Las causas de este abandono son objeto de investigación, pero entre las teorías se incluyen el cambio climático, conflictos internos o la sobreexplotación de recursos.
Teotihuacán dejó un legado duradero en las culturas mesoamericanas posteriores, especialmente entre los aztecas, quienes la consideraban un lugar sagrado y la asociaban con la mitología de la creación. Hoy, Teotihuacán es un sitio arqueológico clave y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, visitado por miles de turistas cada año.