La diabetes es una de las enfermedades más frecuentes debido a factores genéricos o por una serie de desencadenantes que pueden provocar que se desarrolle la enfermedad. En datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) del 2021, se registró un total de 12 millones 400 mil personas que padecían diabetes.
Por su parte, en el año 2022, el Sistema de Información de la Secretaría de Salud informó que solo en la Ciudad de México se registraron más de 373 mil casos positivos de diabetes.
Es por esto que es necesario conocer las problemáticas que aquejan a esta enfermedad, ya que en las temporadas de calor la sensación térmica para quienes la padecen es mayor en comparación a quienes no tienen diabetes, por lo que es importante tener ciertas consideraciones para evitar malestares.
¿Cuántos tipos de diabetes existen?
La diabetes tipo 1 se caracteriza por que el páncreas no produce insulina o produce pocas cantidades. La insulina es una hormona que se encarga de ayudar a que el azúcar en la sangre entre a las células del cuerpo para que sea usada como una fuente de energía.
Sin la ayuda de la insulina el azúcar se mantiene en la sangre y no puede ser absorbida de manera correcta. No se sabe de manera exacta la razón por la que puede desarrollarse esta enfermedad; sin embargo se piensa que puede ser por una reacción autoinmunitaria en la que el cuerpo por si mismo destruye las células que producen insulina.
Por su parte, la diabetes tipo 2 es una enfermedad causada debido a la manera en que las células reaccionan ante la insulina, lo que provoca que no se utilice adecuadamente y se mantenga en la sangre. Esta afección se caracterizaba por aparecer en edades adultas; sin embargo, también se ha diagnosticado en personas jóvenes y niños.
¿Por qué quienes padecen esta enfermedad tienen una mayor sensación térmica?
Según el portal de Laboratorios Farma, las personas que padecen diabetes tienen mayor sensibilidad al calor, lo que se debe a factores como las complicaciones de ciertos padecimientos que incluyen el daño en los nervios y vasos sanguíneos, ya que pueden afectar las glándulas del sudor, de modo que no permiten una adecuada regulación térmica.
Es por esto que quienes padecen esta enfermedad no pueden enfriar su cuerpo con la misma rapidez que una persona que no la padece, por lo que son más propensas a sufrir un golpe de calor o complicaciones relacionadas con la insulina.
Por su parte, el portal de Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, señala que las personas que padecen cualquiera de los tipos de diabetes se deshidratan más rápido. Es por esto que si no toman suficientes líquidos, los niveles de azúcar en la sangre se pueden elevar, además mientras más altos niveles presenten, más serán las cantidades de veces que necesite orinar.
También el calor provoca que la insulina se absorba más rápido, por lo que favorece la aparición de la hipoglucemia, que es presentar una cantidad baja de azúcares en la sangre.
¿Qué se debe hacer para mantener la temperatura corporal?
Algunas de las recomendaciones en temporada de calor son:
Mantenerse hidratado
Evitar las bebidas alcohólicas, las que contienen cafeína y las azucaradas
Checar de manera regular los niveles de insulina que se manejan
Usar ropa ligera y suelta
Alejar los medicamentos del calor y mantenerlos frescos, en este caso la insulina y cualquier otro que sea necesario
Mantenerse en lugares frescos o con presencia de aire acondicionado