Usuarios de redes sociales ‘festejan’ con MEMES la vinculación a proceso de Fofo Márquez por tentativa de feminicidio

Las redes sociales habían sido el medio ideal para que el millonario influencer Fofo Márquez presumiera todos lo lujos que se daba con la fortuna de su padre. Sin embargo, fueron estas mismas las que viralizaron el video en donde se le puede ver golpeando a una mujer terminando detenido y vinculado a proceso por el delito de tentativa de feminicidio, resolución que generó muchos memes.

Pese a que en sus perfiles cuenta con cientos de seguidores, desde hace varios años se convirtió en uno de los personajes digitales más repudiados de todo México ya que en diversas ocasiones realizó comentarios con trasfondo machista, clasista y alegando que en su país era totalmente intocable, por lo que podía hacer lo que quisiera.

No obstante, la denuncia por parte de la afectada y la presión que ejercieron las redes sociales para ponerle un alto al joven originario de Jalisco hicieron efecto y ahora, pese a negarse en un inicio a cooperar, se encuentra en prisión.

Conocido influencer que presumía su vida llena de lujos y excesos, fue acusado de agredir a una mujer en Naucalpan, Estado de México. Según reportes oficiales, el incidente ocurrió durante una confrontación en una vía pública de dicho municipio cuando la víctima habría dañado uno de los espejos de la camioneta del jalisciense, acción que generó el enojo del ahora detenido.

Las autoridades locales, tras hacerse viral el video de la golpiza, iniciaron una investigación para esclarecer los hechos y determinar las responsabilidades correspondientes dando como resultado la emisión de una orden de aprehensión en su contra por lo que de inmediato fue trasladado al penal de Barrientos, en el municipio de Tlalnepantla.

Durante la tarde de este miércoles, 10 de abril, se dio a conocer que el juez que lleva el caso del joven millonario determinó en la audiencia que Rodolfo Márquez incurrió en el delito de feminicidio en la agravante de tentativa.

Al escuchar el dictamen, rápidamente reaccionó con evidente temor y preocupación alegando que estaría dispuesto a dejarse golpear con tal de evitar pasar hasta más de 40 años en la cárcel pues considera que estar privado de su libertad es lo peor que le puede pasar a una persona.

“Mi cabeza tiene precio, temo por mi vida, no quiero morir en la cárcel. Si quieren me puedo hincar aquí para que todas las mujeres que están en esta sala me pateen”, fueron sus palabras en un intento por resarcir el daño que le hizo a la señora de 52 años de edad.

La Fiscalía del Estado de México ha tomado medidas legales contra un individuo, identificado como Márquez, por su implicación en un incidente que casi culmina en feminicidio. Las autoridades aseguraron que los actos violentos de Márquez solo se detuvieron cuando transeúntes intervinieron para ayudar a la víctima. Este hecho se vio respaldado por evidencias vidográficas y testimonios que documentan la agresión. Además, se destacó que Márquez tiene conocimientos en técnicas de boxeo recreativo, lo cual agrava su responsabilidad en el ataque.

En el análisis del caso, se subrayó el peligro adicional al que Márquez expuso a la víctima, situándola en un lugar donde corría riesgo de ser atropellada. Esta circunstancia resultó clave para calificar la gravedad del ataque. Dentro del marco legal mexiquense, el delito de tentativa de feminicidio impone penas significativas, oscilando desde un mínimo de 13 años y 4 meses hasta una máxima de 46 años y 8 meses de prisión, amén de multas que pueden alcanzar hasta los 3,332 días de salario mínimo.

Este caso destaca no solo por la severidad de las acciones del agresor sino también por la importancia de la intervención ciudadana en la prevención de consecuencias todavía más trágicas. El hecho de que la agresión cesara gracias a la ayuda de terceros marca un punto crítico en el relato de los hechos, siendo este un llamado a la conciencia social sobre la importancia de no permanecer indiferentes ante actos de violencia.

La legislación en el Estado de México refleja un compromiso continuo con la protección de las víctimas de violencia de género, estableciendo penas que buscan disuadir a los potenciales agresores y justo castigo para quienes transgredan las leyes. El caso de Márquez sirve como un recordatorio sombrío de los peligros que enfrentan las mujeres y la necesidad de una vigilancia constante y acciones decisivas por parte de las autoridades para garantizar su seguridad.