Meredith, la mujer trans de 20 años que murió tras ser atacada a golpes por cuatro sujetos en Michoacán

Meredith Escarlet, una joven de 20 años, perteneciente a la comunidad trans, perdió la vida el pasado martes 9 de abril, luego de permanecer en terapia intensiva durante casi dos semanas tras ser golpeada de forma brutal por cuatro sujetos, cuando se encontraba acompañada de unas amigas.

La agresión se registró el pasado 30 de marzo, cuando Meredith y sus amigas fueron sorprendidas por cuatro hombres, quienes sin cruzar palabras llegaron y las agredieron de forma brutal, siendo la más afectada la ahora occisa.

Fue el pasado 7 de abril, cuando la joven fue declarada con muerte cerebral, debido a las graves lesiones recibidas, mientras que de los responsables no se sabe nada.

El suceso, que también dejó dos mujeres heridas, se desencadenó en las proximidades del fraccionamiento Galaxia-Tarímbaro. Este violento acto marcó un lamentable episodio de violencia en la región.

Durante este brutal encuentro, una de las amigas de Meredith logró huir para ponerse a salvo, mientras otra quedó inconsciente. Al recuperar la conciencia, esta última, devastada, dio aviso a los servicios de emergencia y halló a Meredith en condiciones críticas debido a severos traumatismos craneales.

Meredith estuvo durante todo ese periodo en el Hospital Civil de Morelia, Michoacán, donde recibió atención médica especializada en la unidad de terapia intensiva.

Las autoridades locales se encuentran investigando el incidente en busca de los responsables, en un intento por esclarecer los motivos detrás de este deplorable ataque y aplicar la justicia correspondiente.

Hasta el momento no se sabe nada de los cuatro responsables, quienes al lograr su cometido emprendieron la huida, dejando a las otras tres jóvenes heridas, pero que para fortuna sobrevivieron, como si fuera un ataque directo hacia Meredith.

Este suceso aumenta la preocupación sobre la violencia dirigida hacia la comunidad LGBTQ en la región, poniendo de manifiesto los desafíos en torno a la seguridad y la inclusión social de sus miembros.

Este caso ha resonado en varias plataformas de medios digitales y organizaciones defensoras de los derechos humanos, quienes exigen respuestas y acciones concretas para prevenir futuros actos de violencia hacia la comunidad trans.

La pérdida de Meredith Escarlet no solamente ha dejado un vacío entre sus seres queridos sino que también ha provocado una ola de indignación y solidaridad entre activistas y comunidades a nivel nacional que claman por un cambio significativo en la percepción y tratamiento hacia las personas trans.