Luego de que vecinos de distintas colonias de Benito Juárez denunciaron que el agua potable de sus casas tenían una consistencia grasosa y con olor a combustible, las autoridades de la Ciudad de México y federales aseguraron la noche del martes 9 de abril el pozo de agua ubicado en un parque de la colonia Alfonso XIII de la alcaldía Álvaro Obregón.
Éste fue acordonado por el Gobierno de la CDMX, Petróleos Mexicanos (Pemex), la Guardia Nacional, el Heroico Cuerpo de Bomberos y la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la Ciudad de México; autoridades capitalinas informaron que se tomaron pruebas para determinar si el agua del pozo está contaminada y si es la razón de que el líquido llegue contaminado a los hogares de Benito Juárez.
Sin embargo, personal de la Álvaro Obregón -donde se halla el pozo asegurado- denunció en redes sociales que no les permitieron acceder al mismo, tal como indicó Mariana Rodríguez Mier y Terán, directora general de Gobierno de la alcaldía. “¿Qué oculta el Gobierno de la CDMX sobre la calidad del agua en Álvaro Obregón y Benito Juárez, que nos impidieron el paso al pozo Alfonso XII?”, escribió en X, acompañado de un video donde se le ve forcejeando para entrar.
La funcionaria local exigió respuestas al gobierno de Martí Batres pues asegura que ella debe rendir cuentas a los pobladores de Álvaro Obregón también. “Lamentablemente no nos dejan pasar. El pozo está cerrado, no nos dejan ingresar y se supone que somos autoridad aquí en la alcaldía y queremos saber qué es lo que está sucediendo”, cuestiona Rodríguez Mier y Terán.
Lo que se sabe sobre el agua contaminada
Mariana Rodríguez Mier y Terán también mostró en redes sociales un recipiente con el agua que salió del pozo asegurado, la cual es de color ámbar y no transparente, aunque aseguró que no está así porque se trate de una cisterna sucia, sino por contaminación. En este sentido, exigió que el gobierno encabezado por Martí Batres Guadarrama ‘deje’ de ocultar información y le dé la cara a las autoridades de las demarcaciones afectadas, así como a sus habitantes.
Apenas el lunes, el propio jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres, había declarado que se indagaba si el origen del agua contaminada se encontraba al poniente de la capital, y que los primeros indicios apuntaban a que el líquido contenía restos de aceites y lubricantes pero descartó que sus niveles de concentración implicaran riesgo de explosión. Asimismo, el mandatario negó que la contaminación se haya originado en el Sistema Cutzamala, en el tanque de Santa Lucía o en los pozos que suministran a la CDMX.
A su vez, el candidato de la oposición a jefe de Gobierno y exalcalde de Benito Juárez, Santiago Taboada Cortina, condenó la contaminación del agua en la demarcación y criticó el ‘torpe’ actuar de la administración de Batres para resolver la situación. “Apuestan al ocultamiento de la información y se refugian en su negligencia y su incapacidad en lo que podría ser una emergencia de salud pública”, dijo el panista en un video que difundió en sus redes sociales.
De igual forma, informó que la alcaldía Benito Juárez tomó muestras del agua exhibida por los vecinos y las envió a analizar con expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); y advirtió que tanto él, como candidato, y las autoridades de la demarcación, emprenderán acciones legales. Hasta el momento, son nueve colonias las que se han visto afectadas son la Nochebuena, Ciudad de los Deportes, Del Valle Norte, Del Valle Centro, Nápoles, Tlacoquemécatl, Extremadura, Narvarte y San Juan.