La actriz Ana Layevska, conocida por sus papeles en telenovelas mexicanas, ha suscitado opiniones divididas tras compartir una experiencia de sus vacaciones en Islas Caimán, territorio británico de Ultramar.
Junto a su familia, su esposo Rodrigo Moreira y sus hijos Masha y Santiago, Layevska disfrutó de un momento que generó controversia: nadar con mantarrayas.
A pesar de las reacciones positivas de colegas como Alejandra Robles Gil y Katie Barberi, quienes le desearon lo mejor para esta escapada familiar, “wow, qué bonito” y “OMG, qué valiente, querida. Pásenla súper”, numerosas críticas emergieron en la esfera digital, cuestionando este tipo de interacciones con la vida marina.
“Nunca había nadado con mantarrayas y mucho menos tratado de darle un beso. ¡Y vaya que me ha tocado dar muchos besos actuando, pero nunca (a) una criatura marina! Aquí mi amiga me está dando un masajito en la espalda y conociéndome. Y, claro, el chapuzón del final (fue) el remate perfecto. Algo que definitivamente hay que vivir. Si es que se atreven”, escribió la actriz de 42 años.
La controversia se centra en la preocupación por el bienestar animal y el impacto del turismo en la vida silvestre. En el material compartido por Layevska, se la puede ver siguiendo las instrucciones para interactuar con una mantarraya, generando así un debate sobre la ética detrás de estas actividades turísticas.
Las duras críticas a Ana Layevska por nadar entre mantarrayas
Mientras algunas celebridades felicitaban a la actriz por su valentía, otros usuarios expresaron su descontento, argumentando que el turismo no debería involucrar animales ni perturbar su hábitat natural.
“¡Pésimo, ningún viaje de turismo debe incluir animales! ¡Cuándo lo entenderán!”, “Se espantó, convivir con cualquier especie animal no es parte de su forma natural de vida y menos para complacer al ser humano”, “Molestar a un animal en su hábitat y obligarlo a interactuar con uno es malísimo, pobre animal, cuánto estrés”, “Los animales no deberían estar a disposición de cualquiera y menos como manera de mercantilizar a la naturaleza”, son algunos de los comentarios que desató la imagen.
Este episodio destaca la creciente sensibilidad hacia la conservación de la naturaleza y el respeto por los animales. Las críticas señalan una tendencia en contra de la explotación de la vida silvestre con fines de entretenimiento, enfatizando la importancia de buscar alternativas más sostenibles y éticas para el turismo.
En tanto, la actriz ucraniana de ascendencia rusa, quien ha desarrollado su carrera en México en telenovelas como Primer amor... a mil por hora y Locura de amor, no hizo algún comentario a los ácidos mensajes de sus seguidores.
La discusión abierta por este incidente subraya la necesidad de un mayor diálogo sobre cómo el ser humano interactúa con su entorno, buscando un equilibrio entre disfrutar de la naturaleza y preservarla para las futuras generaciones.