México está libre de influenza aviar, asegura Secretaría de Agricultura

México fue declarado este viernes como zona libre de influenza aviar tipo A, subtipo H5N2 de alta patogenicidad en aves de corral por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).

La ausencia del virus en el territorio nacional fue confirmada por técnicos del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), en coordinación con gobiernos estatales e industria avícola.

“Lo que eleva el estatus sanitario del país, fortalece la comercialización e impulsa la competitividad entre el sector productivo de animales vivos y el de sus productos y subproductos”, señaló este viernes la dependencia en un comunicado.

La declaratoria especifica que la autoridad sanitaria mantendrá la campaña y las medidas zoosanitarias que deberán aplicarse para el diagnóstico, prevención, control y erradicación de la influenza aviar notificable.

Lo anterior, debido a que aún existe la circulación del subtipo H5N2 de baja patogenicidad y H7N3 de alta patogenicidad en el territorio nacional.

La vacunación contra el virus de influenza AH5N2 de baja patogenicidad -indicó- podrá aplicarse únicamente en unidades de producción ubicadas en zonas con estatus zoosanitario de escasa prevalencia, cuando se cuente con autorización del órgano desconcentrado de Agricultura.

Además, con el fin de mantener el estatus de país libre, los avicultores deben mantener en operación la vigilancia epidemiológica, las medidas de bioseguridad, prevención, diagnóstico, trazabilidad, control de la movilización, transporte, tránsito, comercialización e importancia de aves de corral, sus productos y subproductos, en unidades de producción tecnificada y en predios de traspatio.

Esto con el objetivo de proteger la industria avícula nacional, cuyo valor asciende a más de 221 mil 207 millones de pesos.

El último caso corroborado en unidades de producción comercial del país fue el 25 de junio de 1995.

La influenza aviar tipo A es causada por un virus de la familia Orthomyxoviridae y afecta a aves de corral, como guajolotes, gallos, pollos y codornices.

El virus se encuentra en secreciones y excreciones (saliva, mucosidad y/o heces) de aves infectadas, y su transmisión ocurre a través del contacto directo; de fómites (objetos contaminados) como personas, vehículos, material o equipo; o vectores mecánicos como las moscas, así explicó el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).

La transmisión a humanos es relativamente rara y suele ocurrir por contacto directo con aves infectadas o superficies contaminadas con sus secreciones.

La dependencia señaló que una vez que las aves se infectan mueren súbitamente, incluso cuando no presentan signos clínicos, los cuales son:

• Fiebre
• Depresión
• Falta de apetito
• Estornudos
• Descarga nasal sanguinolenta
• Diarrea
• Inflamación con coloración púrpura o amoratada de la cresta y barbilla
• Plumaje erizado
• Temblores
• Debilidad
• Incoordinación y amontonamiento
• Disminución de la producción de huevo
• Presencia de huevo decolorado, blando, deforme y con albúmina acuosa

La enfermedad se encuentra en países de América, Europa, Asia y África, y su transmisión puede prevenirse al controlar la movilización de aves, productos y subproductos. Además de:

• Establecer protocolos sanitarios para las personas que ingresen
• Lavar y desinfectar todos los vehículos que ingresen al lugar donde habitan los animales
• Utilizar tapetes sanitarios en la entrada principal y en cada caseta
• Revisar la parvada para detectar aves con signos clínicos sugestivos
• Aislar aves enfermas o muertas
• Realizar lavado y desinfección de instalaciones, material y equipo
• Considerar un periodo de vacío sanitario entre cada ciclo productivo
• Implementar procedimientos para el control de fauna silvestre y eliminación fauna nociva

Esta enfermedad es considerada por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) como una infección que debe estar sujeta a control oficial por parte de las autoridades nacionales.