Entre veladoras y pancartas, Elena Larrea fue homenajeada en el Palacio de Bellas Artes

La comunidad en línea y activista de los derechos de los animales se encuentra de luto tras el fallecimiento de Elena Larrea, destacada modelo e influencer que dedicó gran parte de su vida y recursos obtenidos de OnlyFans para sostener el santuario Cuacolandia, en Puebla, un refugio para caballos que sufrieron de maltrato.

La muerte de Larrea, ocurrida el martes 19 de marzo de 2024 a las 15:30 horas a causa de una trombosis pulmonar, ha generado una ola de tristeza entre sus seguidores y todo aquel vinculado a la causa animalista.

Elena Larrea, quien también se valió de su influencia en redes sociales para concientizar sobre el tratamiento ético hacia los animales, fue una pionera en la fundación de Cuacolandia y enfocó sus esfuerzos en el cuidado de al rededor de 300 caballos.

Este santuario se ha convertido en un símbolo de esperanza para equinos rescatados del abuso y el abandono en México. “Con valentía impulsó desde esta fundación, el amor para que nuestros cuacos, burros y mulares vivan en libertad y en condiciones adecuadas”, expresó un comunicado oficial de Cuacolandia, reflejando el profundo impacto de su legado.

“Recordaremos y seguiremos trabajando por todo aquello que con valentía impulsó desde esta fundación”, se lee, enfatizando la intención de perpetuar su obra.

El reconocimiento de sus esfuerzos trascendió su vida, llevando a que al rededor de un centenar de sus admiradores y seguidores acudieran a un emotivo homenaje en la explanada del Palacio de Bellas Artes este domingo 24 de marzo.

Dicha ceremonia tuvo lugar a partir de las 18:30 horas en la explanada del emblemático recinto del Centro Histórico, en la Ciudad de México, donde se congregaron decenas de personas vestidas de blanco y con veladoras, simbolizando el respeto y amor por la dedicación de la modelo muerta a sus 31 años.

Las redes sociales se llenaron de imágenes y testimonios del homenaje, demostrando que el alcance de Larrea va más allá de su presencia física.

Con megáfono en mano, algunas personas “echaron porras” a la fallecida activista, y en las pancartas se podían leer mensajes animalistas y en honor a Larrea.

Su conexión con los caballos y su compromiso con su bienestar quedaron eternizados en las numerosas fotos compartidas en sus plataformas, donde siempre se le vio sonriente y en armonía con los animales que tanto amaba.

“Decenas de personas despiden a la activista en pro de los derechos de los animales con emotivo homenaje en la explanada de Bellas Artes. Cuentan anécdotas, cuentan el cariño que le tenía a los animales. Cuentan lo duro que es despedirse de ella.”, “Dejaste un legado que nos toca defender, estás aquí en cada uno de nosotros, no tengo duda.”, “#ElenaLarrea bellas artes se viste de blancos y se acompaña de velas para despedirte”, se lee en la red social X bajo el hashtag #ElenaLarrea.

La influencia de Larrea fue tal que incluso contribuyó a tipificar la Zoofilia como delito en el estado de Puebla, marcando un antes y después en la legislación protectora de los animales en la región.

Su pasión por el bienestar animal y su innovador método de financiamiento a través de su carrera como modelo de OnlyFans abre un debate sobre las formas modernas de activismo y cómo las plataformas en línea pueden servir para apoyar causas benéficas.

La partida de Elena Larrea deja un vacío en la comunidad animalista y en el santuario Cuacolandia, pero también establece un precedente sobre el impacto que una persona puede tener en la lucha por un mundo más compasivo para todas las especies. Su legado persistirá en cada uno de los equinos rescatados, en cada ley que proteja a los animales y en cada persona que se inspire para seguir su ejemplo.