Un violento incidente se reportó en el municipio de Tonalá, en la costa de Chiapas, donde un hombre fue brutalmente agredido por un grupo de individuos, presuntamente involucrados en la disputa por el control del tráfico de migrantes en la región. Este suceso se desarrolló sobre la carretera federal 200, ruta que se extiende desde la frontera de Guatemala hasta Oaxaca, una zona crucial por su uso en el tránsito de migrantes.
La agresión fue capturada en un video que se ha difundido a través de las redes sociales. En las imágenes se observa cómo el hombre, junto a la parte posterior de su vehículo con placas de Chiapas DNT-490-E, es golpeado repetidamente por al menos uno de los presuntos criminales. Durante el ataque, el individuo agredido suplica clemencia sin éxito.
Fuentes policiales filtraron que el violento episodio tuvo lugar en Tonalá, destacando la gravedad del conflicto en la región relacionada con la trata de personas. Sin embargo, hasta el momento, no se ha logrado identificar a la víctima de la agresión.
Hasta la fecha, las autoridades no han emitido declaraciones ni proporcionado información adicional sobre el caso, lo que mantiene en incertidumbre los detalles completos del incidente y las circunstancias que llevan a estos niveles de violencia relacionada con el tráfico de migrantes en la zona. La comunidad espera respuestas y acciones concretas para abordar y mitigar esta problemática que afecta tanto a los locales como a los migrantes que atraviesan estas rutas.
Tablean a chofer de Uber por traficar personas
En un reciente acto de violencia vinculado al tráfico de personas en Ciudad Juárez, Chihuahua, en la frontera de México, un conductor de Uber fue agredido físicamente por integrantes del crimen organizado tras ser acusado de transportar migrantes. El incidente, que tuvo lugar en la carretera Villa Ahumada – Juárez, fue registrado en video y posteriormente difundido a través de las redes sociales el pasado mes de junio.
El chofer, cuya identidad no ha sido revelada, fue interceptado por los criminales mientras llevaba a un número indeterminado de migrantes hacia la frontera. Esta acción provocó la ira de los agresores, quienes procedieron a “castigarlo” con tablazos debido a su participación en lo que consideran una intrusión en sus operaciones ilegales de tráfico de personas. Este sector delictivo ha sido identificado por las autoridades como exclusivo del crimen organizado, el cual reporta ganancias millonarias.
Se ha informado que los migrantes pagan sumas que oscilan entre cinco y diez mil dólares por persona para ser trasladados hacia la frontera, evidenciando las elevadas ganancias que esta actividad ilícita genera. Frente a este lucrativo negocio, los grupos criminales han mostrado una actitud hostil hacia cualquier individuo o entidad que intente ofrecer servicios de transporte a los migrantes sin su consentimiento.
Las autoridades continúan investigando el incidente y buscan implementar medidas para proteger a los involucrados en el tráfico legal de personas, así como para combatir el dominio del crimen organizado sobre esta práctica. La comunidad internacional permanece atenta a la evolución de esta problemática en la región fronteriza.