Por motivos de salud, económicos o ambientales, algunas personas han optado por sustituir la carne de su dieta diaria con proteínas de origen vegetal.
Al hacerlo, el cuerpo puede experimentar algunos cambios, como una mejora en la salud intestinal o en la presión arterial, debido a que se dejan de comer altas cantidades de sodio presentes en los productos cárnicos procesados.
Reducción del riesgo de enfermedad
Entre los cambios que el cuerpo experimenta al dejar de consumir carne, se encuentra un riesgo menor de desarrollar diabetes tipo 2, obesidad, cáncer y otras enfermedades cardiovasculares. Lo anterior, de acuerdo con un estudio publicado en la Revista Europea de Nutrición Clínica y citado por el Instituto de Nutrición Integrativa.
Mejoran niveles de nutrientes
El Instituto mencionado anteriormente señaló que una dieta a base de alimentos de origen vegetal proporciona la fibra y los nutrientes necesarios que podrían perderse con el consumo frecuente de carne.
Además de que los alimentos a base de plantas tienen un alto contenido en fitonutrientes y antioxidantes, como los carotenoides, que al convertirse en vitamina A favorecen el sistema inmunitario.
Mejora la salud intestinal
A saber del Instituto de Nutrición Integrativa, la microbiota del intestino puede alterarse por compuestos presentes en la carne y que cambiaría al preferir una dieta con poca carne.
Pérdida de peso
Con respecto a este punto, la Clínica Mayo señala que las personas que no comen carne por lo general consumen menos calorías y grasas, lo que provoca una pérdida de peso.
Mejora la presión arterial
Los productos cárnicos procesados contienen altas cantidades de sodio, por lo que al reducir su consumo se tendrá un efecto positivo en la presión arterial.
Si bien dejar de consumir carne puede tener efectos benéficos para la salud, lo recomendable es consultar con un especialista para evitar ponerse en riesgo.
Y es que de acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, la carne es un alimento que aporta muchos nutrientes si se consume correctamente. Esto es no más de tres veces a la semana.
Por ejemplo, al ser una fuente de vitamina B12, su ingesta ayuda a metabolizar proteínas, a formar glóbulos rojos y a darle mantenimiento al sistema nervioso central.
A esto se suma su aporte de hierro, un elemento importante para mantener un adecuado transporte de oxígeno en la sangre, y zinc, que ayuda a proteger al organismo contra el daño oxidativo, a la cicatrización de la piel y la creación de la hemoglobina.
Alternativas a la carne
Existen algunos alimentos que pueden ser sustituidos por la carne y que también aportan beneficios a la salud, como las legumbres, los frutos secos, la clara de huevo, las setas y algunas otros alimentos que contribuyen al aporte de las proteínas.
Como se mencionó párrafos arriba, la sustitución de la carne no debe ser repentina y debe ser supervisada por un especialista para evitar problemas de salud.
¿Por qué se celebra el Día Mundial sin Carne?
Fue en 1985 cuando se celebró por primera vez el Día Mundial sin Carne con el objetivo de generar conciencia sobre los beneficios para la salud y el medio ambiente de llevar una alimentación basada en plantas.
La iniciativa fue promovida por Movimiento por los Derechos de los Animales de Granja (FARM, por sus siglas en inglés), una organización internacional sin ánimo de lucro que trabaja para promover los derechos de los animales y una dieta vegana.
Años más tarde se complementó con la Semana Mundial sin Carne, que empieza desde 15 de junio y termina el 21 del mismo mes.