¿Qué pasa si aparece un pez remo? Bañistas encuentran un ejemplar de esta mítica especie en Mazatlán

La playa de la Isla de Piedra en Mazatlán, Sinaloa, se ha convertido en tendencia luego de que este fin de semana unos bañistas encontraran un ejemplar de pez remo, una mítica especie marina que pese a ser hermosa siempre provoca inquietud por todas las creencias que giran en torno a él, entre ellas la idea de que es un augurio de desastres naturales como los terremotos.

Un video compartido a través de las redes sociales deja ver el momento en el que los visitantes de la playa hallan el largo pez: “Qué bonito, esto viene de las profundidades”, se escucha decir a un hombre, mientras se ve cómo las olas arrastran al también llamado “rey de los arenques”.

Sin embargo, en otra toma se puede observar que el pez se encuentra lejos del agua y está muriéndose. Una persona intenta tomarlo de la cola y llevarlo de vuelta al mar, pero una ola lo impide y lo arrastra nuevamente a la arena.

Luego de ello se desconoce si los presentes salvaron al pez remo o si éste lamentablemente murió.

El hallazgo del pez remo ha comenzado a causar preocupación entre los mexicanos y no precisamente por la apariencia física inusual de esta especie enigmática y fascinante del océano, sino por los mitos asociados a su presencia.

Un pez remo puede alcanzar una longitud superior a los 10 metros, por lo que se trata de los peces óseos más largos del mundo. Su hábitat natural se extiende a las profundidades oceánicas, usualmente entre los 200 y los mil metros bajo la superficie, lo que hace que sus avistamientos sean raros y rodeados de misterio.

La anatomía del pez remo es singular: poseen cuerpos alargados y aplanados lateralmente, con una aleta dorsal que recorre toda la longitud de su cuerpo, desde la cabeza hasta la cola. Esta aleta, en algunos especímenes, presenta toques de un color rojizo brillante, sumando a su apariencia extraordinaria. A diferencia de muchos otros peces, los peces remo carecen de aletas pélvicas y su aleta caudal es pequeña o inexistente.

En cuanto a su comportamiento, se sabe poco debido a la dificultad de observar a estos animales en su hábitat natural. Los científicos creen que los peces remo llevan una existencia solitaria y probablemente sean nectónicos, es decir, que tienen la capacidad de nadar activamente en contra de las corrientes.

Los peces remo se alimentan principalmente de plancton, pequeños crustáceos y peces, los cuales capturan utilizando su boca, adaptada para succionar a sus presas. A pesar de su gran tamaño, estos peces no representan ninguna amenaza para los seres humanos.

Uno de los aspectos más intrigantes del pez remo es su vinculación con mitos y leyendas marinas. En diversas culturas se ha creído que el avistamiento de un pez remo en la superficie o varado en las playas es un mal augurio, presagiando terremotos o tsunamis. Sin embargo, estos mitos carecen de sustento científico.

Los investigadores creen que los avistamientos de peces remo en la superficie podrían deberse a enfermedades o desorientación del animal, más que a un presagio de desastres naturales.

A pesar de los misterios que rodean a estos peces, su estudio es de gran interés para la comunidad científica. Analizar su comportamiento, reproducción y ecología no solo ayuda a desentrañar los secretos de estas criaturas, sino también a entender mejor los ecosistemas marinos profundos, aún ampliamente desconocidos.

Aunque se dice que incluso la Biblia retoma esta creencia, en realidad el texto sagrado no menciona específicamente a los peces remo o a una fauna marina con tanto detalle y sólo hace referencias genéricas a los peces y otros seres vivos para ilustrar enseñanzas o narrar historias.

La idea de que los peces remo se asocian a los sismos proviene de antiguas creencias y leyendas, especialmente en regiones del Pacífico, como Japón, donde la biodiversidad marina tiene un papel significativo en la cultura. Esta asociación entre los avistamientos de peces remo y la ocurrencia de terremotos y tsunamis se basa en la creencia de que estos peces, que normalmente habitan en profundidades oceánicas, emergen a la superficie o se varan en las playas como presagio de desastres naturales inminentes.

Una de las teorías propuestas para explicar este fenómeno sugiere que los peces remo podrían ser sensibles a los movimientos sísmicos submarinos y a cambios en el campo magnético terrestre, lo que les haría ascender a la superficie antes de que ocurran terremotos. Sin embargo, esta hipótesis no tiene suficiente sustento científico y señalan que sólo con coincidencias.