Félix Garza, el abogado de Miguel Ángel Félix Gallardo en una entrevista con el periodista Diego Enrique Osorno, compartida en el libro ‘Bienvenido a Sinaloa’ habló sobre la estancia de su cliente en el penal del Altiplano, en Almoloya de Juárez, Estado de México.
En su mensaje, el letrado argumentó que Miguel Ángel perdió algunas de sus pertenencias al interior del penal de máxima seguridad, derivado del asesinato de Arturo ‘El Pollo’ Guzmán Loera, quien a finales del 2004 fue finado por desconocidos en el interior.
Debido a ese homicidio y al de Miguel Ángel Beltrán Lugo, ‘El Ceja Güera’ fue que tomaron la decisión de fortalecer la seguridad en el Altiplano, por lo que les retiraron biblias, el reglamento, así como otras cosas, sin embargo, jamás castigaron a nadie tras lo ocurrido.
“Bueno normalmente lo que él compra en la tienda, son galletas que tiene trigo, chocolates, agua, jabón, detergente, agua, jabón, detergente, papel sanitario, nada más allá de eso, ah también tiene unos lentes y dos toallas,’¿ no tiene un amuleto a algo así?’, no puede tener nada, no pueden tener una medallita, una imagen religiosa o un símbolo, nada, nada, nada, les quitaron las biblias, les quitaron el reglamento, se lo quitaron todo en 2004 y 2005, ‘¿por qué?’, por los dos homicidios que hubo, el de ‘El Ceja Güera’, el del ‘Pollo’ Guzmán Loera, pero nunca, pero nunca han detenido, nunca han investigado y no han querido investigar qué fue lo que pasó”, se lee en el libro ‘Bienvenido a Sinaloa’ de Diego Enrique Osorno.
El asesinato del hermano de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera ocurrió el 31 de diciembre del 2004, luego de que se desatara un conflicto entre diferentes grupos criminales, tales como el Cártel de Juárez y el de Sinaloa por la ejecución de Rodolfo Carrillo Fuentes, ‘El Niño de Oro’ en el estacionamiento de un centro comercial.
Asesinato de ‘El Ceja Güera’
Beltrán Lugo dejó de existir el 6 de octubre del 2004, luego de que su amigo y compañero de celda Lucio Don Juan Govea le disparó en la cabeza debido a que lo obligaron a cometer el delito, pues de no ser así, ellos le harían daño a su familia.
“Tres balas calibre .22 en el cráneo y dos más en el tórax, recibió el 6 de octubre del 2004 a las 08:30 de la noche en el área de comedor del módulo cuatro de la penitenciaría instalada en Almoloya, Estado de México. Lucio Don Juan Govea, fue el autor material del homicidio, de acuerdo con las investigaciones contenidas en la investigación previa TOLAC3818504″, describió Diego Enrique Osorno en su libro ‘Bienvenido a Sinaloa’.