El liderazgo que ocupan las mujeres en el crimen organizado ha quedado evidenciado con Delia Patricia Buendía Gutiérrez, alias ‘Ma Baker’, quien encabezó una organización delictiva que hoy es conocida como el Cártel de Neza (en referencia al municipio de Nezahualcóyotl, ubicado en el Estado de México, donde solía operar).
A principios de este mes se dio a conocer que una de las hijas de Delia, Marcela Gabriela Bustos, fue detenida junto con otras tres personas en la Ciudad de México (CDMX) por su presunta responsabilidad en delitos de narcomenudeo, extorsión y tráfico de armas.
A raíz de lo anterior se volvió a retomar la historia criminal de ‘Ma Baker’ y los orígenes del Cártel de Neza, el cual se presume sentó las bases para el surgimiento de una de las agrupaciones delincuenciales con mayor presencia en la capital del país: la Unión Tepito.
De acuerdo con el periodista José Antonio Caporal, ‘Ma Baker’ creció en el famoso barrio de Tepito —ubicado en la alcaldía Cuauhtémoc de la CDMX— y en el municipio de Nezahualcóyotl. Como fruto de su primer matrimonio procreó a tres hijas, identificadas como Marcela Gabriela (la mayor), Nadia Isabel (la mediana) y Norma Patricia Bustos Buendía (la menor).
Tras su divorcio, Delia Patricia mantuvo una relación sentimental con Raúl Ramírez Pichardo, un comerciante que se dedicaba a la venta de artículos de contrabando. Aunque ‘Ma Baker’ se desempeñaba como intendente de una escuela de Tepito, también comenzó a involucrarse en la venta de cocaína a finales de la década de los ochenta y principio de los noventa.
Delia introdujo a sus hijas a la venta y distribución de droga cuando ellas eran adolescentes. Cada una llevaba consigo entre 10 y 15 grapas (como se les conoce a los envoltorios de cocaína).
Cuando las hijas de ‘Ma Baker’ crecieron, se juntaron con operadores criminales. Marcela se casó con Mario Solís, alias ‘El Tabique’; Nadia mantuvo una relación con José Carlos Uribe, alias ‘El Pato’, y Norma se vinculó con Carlos Morales Gutiérrez, alias ‘El Águila’. Los dos primeros estaban involucrados en actividades de narcomenudeo y el tercero era un expolicía judicial del Estado de México.
A comienzos de 1990, ‘Ma Baker’ compraba la cocaína en Iztapalapa o Tepito y la distribuía en Nezahualcóyotl, donde tenía casas de seguridad para almacenar la droga y “tienditas” para su respectiva venta.
Con la ayuda de ‘El Águila’ y sus vínculos con autoridades mexiquenses, la agrupación de ‘Ma Baker’ iba creciendo y ganando poder. A mediados de los noventa contaba con seis “narcotienditas” que dejaban una ganancia de hasta 800 mil pesos a la semana por la venta de cocaína, según menciona Antonio Caporal en su libro El Cártel de Neza.
Para finales de los años noventa, ‘Ma Baker’ ya obtenía ganancias millonarias semanalmente y sus operaciones las había extendido a los municipios de Chimalhuacán y Los Reyes.
“En el inicio del segundo semestre de 1999, la organización distribuía cerca de 12 kilos de cocaína al menudeo o grapeada, cuyas ganancias eran calculadas en aproximadamente cuatro millones 800 mil pesos a la semana. La organización tomaba forma y cada cual tenía su labor”, menciona Caporal en el libro referido.
El hermano de Delia, llamado Miguel, proporcionaba el papel usado para elaborar los paquetes de droga, toda vez que tenía una imprenta. Otro grupo se encargaba de empaquetar la cocaína, otro de su transporte y uno más de su respectivo almacenamiento y misión.
A inicios de los 2000, la organización de Ma Baker era identificada como el Cártel de Neza y estaba bajo la mira de las autoridades capitalinas, ya que en 2002 le atribuyeron las ejecuciones de dos mandos policiacos de la Secretaría de Seguridad Pública del entonces Distrito Federal, quienes buscaban desmantelar dicha agrupación.
Ma Baker fue detenida y encarcelada en el 2002 en el penal de Santiaguito, Almoloya de Juárez, por delitos contra la salud, homicidio y delincuencia organizada. Por ello fue sentenciada a 60 años de prisión.
En ese mismo año también fueron detenidas sus hijas Nadia y Marcela. Para ese entonces, el Cártel de Neza también operaba en las alcaldías Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero, así como en los estados de Querétaro y Puebla.