Pati Chapoy, la conductora titular de Ventaneando, y su equipo de producción organizaron un encantador festejo para celebrar el octavo cumpleaños de Michaela Bisogno, hija del presentador Daniel Bisogno. El evento, que tuvo lugar en los estudios de televisión donde se graba el popular programa de espectáculos, contó con la participación del talento y la producción de TV Azteca.
Michaela, quien ha sido una invitada recurrente en el programa, es conocida por su estrecha relación con la periodosta, a quien algunos describen cariñosamente como su “abuela”. Esta conexión especial se refleja en cada encuentro entre la conductora y la niña, quien ha sido recibida con afecto en el foro en varias ocasiones.
Sin embargo, este año la celebración tuvo un matiz particular, ya que Daniel Bisogno se encuentra hospitalizado debido a problemas hepáticos y pulmonares que ha enfrentado desde el año pasado. A pesar de las circunstancias difíciles, su hija pudo disfrutar de su cumpleaños rodeada del amor y la atención de la jefa del programa y el equipo de Ventaneando.
El acceso de los niños al hospital generalmente está restringido, pero en esta ocasión los médicos hicieron una excepción para permitir que Michaela visitara a su padre en su día especial.
El vestido de la hija de Bisogno
Durante el festejo, los conductores de Ventaneando no pasaron por alto el detalle del hermoso vestido que lucía Michaela. Se trató de un diseño exclusivo de Carolina Herrera, la reconocida diseñadora de moda venezolana y favorita de Pati Chapoy.
El vestido, que combina elementos de las colecciones otoño-invierno 2023 y primavera-verano 2024, presenta detalles de encaje y una cinta con el logotipo de la marca. Se estima que este tipo de diseño oscila entre los 6 mil y 15 mil pesos mexicanos.
A pesar del encanto del vestido, las imágenes transmitidas durante el programa revelaron que la pequeña parecía un tanto desconcertada durante la actuación de los payasos llamados “Los Destrampados”. Esto no pasó desapercibido por los presentadores, quienes señalaron el cambio en el ánimo habitual de la niña, atribuido a la preocupación por la salud de su padre.