México es un país que es conocido internacionalmente por su impresionante riqueza histórica y cultural. Las antiguas civilizaciones que vivieron en Mesoamérica antes de la llegada de los españoles han sido sujeto de interés por fanáticos de todo el planeta.
La fascinación que provocan las culturas como la maya, la mexica y la olmeca, a veces, puede llegar a convertirse en ambición, como ya ha ocurrido incontables veces. Y es que son bien conocidas las historias protagonizadas por extranjeros que saquean zonas arqueológicas e intentan volverse ricos con los los tesoros robados.
Del hombre que invadió Chichén Itzá y se llevó importantes piezas que estaban en el fondo del Cenote Sagrado, hasta la anécdota que involucra una ancestral pieza perteneciente a la cultura madre olmeca y que fue robada y destruida para intentar venderse en Estados Unidos; los intentos de enriquecerse con reliquias del pasado han sido muchos.
Un monolito olmeca que le fue arrebatada a un campesino
Uno de estos tesoros que víctimas del pillaje fue un impresionante monolito olmeca de casi 2 mil años de edad descubierto hace ya varios décadas por un campesino, quien fue presa fácil de ambiciosos traficantes de arte. Los extranjeros lograron engañar al hombre y le compraron la pieza prehispánica a muy bajo precio.
Con intenciones de llevarlo hasta Estados Unidos y hacerse de una importante fortuna, los saqueadores lo maltrataron con la intención de reducir su tamaño, volverlo menos pesado y transformarlo lo suficiente para transportarlo por la frontera de México hasta el país vecino.
Lamentablemente el robo a la nación se concretó y el monolito, conocido como un “portal al Inframundo” dada su apariencia de un jaguar con las fauces abiertas, se fue hacia el norte y permaneció allí por varias décadas, hasta que, afortunadamente, fue repatriado desde Denver y recuperado por el Museo Regional de los Pueblos de Morelos, donde se encuentra actualmente.
El “Portal al Inframundo” de Chalcatzingo será intervenido <i>in situ</i>
Durante los venideros cinco meses, en el Museo Regional de los Pueblos de Morelos se llevará a cabo el análisis y la restauración del Monumento 9 de Chalcatzingo, conocido como “Portal al Inframundo”, el importante monolito olmeca que fue recuperado en 2023 tras estar décadas lejos del país.
Este esfuerzo de restauración es notable no solo por su impacto en la preservación del patrimonio cultural del Estado de Morelos y de México, sino también por ofrecer a los visitantes del museo la oportunidad de observar en directo el meticuloso proceso de análisis e intervención que llevan a cabo los especialistas.
El proyecto de análisis, intervención y conservación de la impresionante pieza prehispánica será llevada a cabo por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y tendrá el financiamiento de la Oficina Federal de Cultura de Suiza, que aportó 700 mil pesos. Una vez que el proceso termine, se espera que el monolito regrese a su antiguo hogar, de donde fue robado hace tantos años: la Zona Arqueológica de Chalcatzingo.
Entre los procesos que se llevarán a cabo está la examinación de la pieza con rayos X para así entender el estado del material sin llegar a ser invasivos, limpieza, eliminación de materiales externos, la estabilización a nivel estructura de la pieza que está fragmentada en 25 partes. De igual forma, se le aplicará una reintegración cromática.
La repatriación de la pieza en mayo de 2023, después de décadas desde su sustracción ilegal, marca un momento significativo en la historia de la conservación de artefactos nacionales, celebrando la recuperación de una parte vital de la rica herencia cultural mexicana.