El color de tu coche es más que una simple preferencia estética; juega un papel crucial en su valor de reventa a lo largo del tiempo.
Un análisis reciente realizado por iSeeCars.com, examinando más de 1.3 millones de coches usados de tres años, revela cómo diferentes colores influyen en la pérdida de valor de un vehículo.
Según el estudio, el promedio de depreciación de un automóvil es del 22.5% respecto a su valor original. Sin embargo, hay colores que resisten mejor esta depreciación.
Estos colores hacen que tu auto se devalúe menos
Según un estudio realizado por la empresa iSeeCars en Estados Unidos, los colores llamativos tienden a mantener mejor su valor, mientras que los tonos comunes se deprecian a un ritmo cercano al promedio.
Los coches de color amarillo lideran en este aspecto, con una tasa de depreciación del 13.5%, debido a su asociación con autos deportivos y convertibles, así como a su rareza en el mercado, incluyendo SUV.
Otros colores que destacan por su resistencia a la depreciación son el beige, con una depreciación del 17.8%, y el naranja, con un 18.4%. Estos colores menos comunes tienden a conservar mejor su valor, ya que tienen una menor cuota de vehículos en el mercado, lo que lleva a que los compradores estén dispuestos a pagar más por ellos.
Los colores más populares, como el blanco, el negro y el plateado, tienen un impacto mínimo en la depreciación del valor de reventa. Aunque no perjudican el valor, tampoco ayudan significativamente a mantenerlo. En este sentido, el color beige, con sus diversas tonalidades, destaca como un color neutro que no afecta negativamente al valor de reventa.
Igualmente, tonos como morado, rojo, verde y azul conservan mejor su valor, depreciándose solo en un 14%.
¿Qué colores devalúan mi auto?
Por otro lado, colores como el oro y el marrón presentan una depreciación más alta que la media, a pesar de tener una baja presencia en el mercado. Según Karl Brauer, analista ejecutivo de iSeeCars, la resonancia entre los compradores de coches usados juega un papel crucial en el valor de reventa, incluso si el color no es común.
La depreciación según el color varía también según el tipo de vehículo. En el caso de SUVs, el amarillo y otros colores llamativos muestran la menor devaluación, mientras que el beige es el más propenso a depreciarse. En pickups, todos los colores se deprecian menos que el promedio, siendo el beige el de menor depreciación y el verde el de mayor.
Para sedanes, los tonos morado y rojo son los que menos afectan el valor, mientras que el negro, marrón y blanco son los que más lo impactan negativamente. En el caso de las minivans, en general se deprecian más que el promedio, siendo el verde y marrón los colores de menor depreciación, y el rojo y negro los que más afectan el precio de reventa.
Elegir el color adecuado para la carrocería de tu automóvil puede marcar la diferencia en su valor de reventa. Es una consideración importante para aquellos que planean vender su vehículo en el mercado de seminuevos o usados.