Chorizo verde o rojo: ¿Cuáles son las diferencias?

En el mundo culinario, los embutidos son una delicia apreciada por su sabor único y su versatilidad en la cocina. Hablando específicamente de la gastronomía mexicana, hay dos variedades particularmente populares: El chorizo rojo y el chorizo verde, cada uno con su propia combinación de ingredientes y perfiles de sabor, pero con un origen y preparación poco conocido entre propios y extraños.

Siendo uno de los alimentos más versátiles en las cocinas mexicanas, el chorizo se mantiene como un referente de calidad y un producto que nos cuenta historias de tradición y sincretismo culinario. En México, se tiene la dicha de contar con la variedad del “Chorizo verde”, mismo que es originario de Toluca, Estado de México, y que suele verse en tacos, quesadillas, tortas, entre otros antojos.

Siendo residente en la zona centro del país, es común que si alguna vez pasaste por La Marquesa, Tres Marías o bien, estuviste en Toluca, te tomaste la oportunidad para degustar antojitos y comida típica del lugar acompañados con dicha delicia. No obstante, es común que los mismos comensales desconozcan las diferencias entre ambos embutidos.

El chorizo rojo, también conocido como chorizo español, tiene sus raíces en la península ibérica y es un elemento básico en muchas cocinas españolas y latinoamericanas. Su característico color rojo profundo se debe a la combinación de pimentón y otras especias.

Por otro lado, el chorizo verde es típicamente asociado con la cocina mexicana, más específicamente de Toluca. Su color verde vibrante proviene de la mezcla de ingredientes frescos como cilantro, epazote y chiles verdes.

Por un lado, el chorizo rojo suele estar hecho con carne de cerdo picada, a la que se añade pimentón, ajo, orégano y otras especias. Esto le confiere un sabor rico y ahumado, con un ligero toque picante dependiendo de la variedad de pimentón utilizada.

En contraste, el verde incorpora ingredientes frescos como cilantro, chiles verdes, epazote y a veces espinacas. Estos elementos le otorgan un sabor herbal y refrescante, con un nivel de picante que puede variar según la cantidad y el tipo de chiles utilizados.

Ambas variedades de embutidos son extremadamente versátiles en la cocina y se pueden utilizar de diversas maneras para añadir sabor y profundidad a una amplia gama de platos. El clásico (rojo) es ideal para cocinar a la parrilla, freír o agregar a guisos y sopas para aportar un toque de calor y sabor ahumado; destacando principalmente en los “Tacos campechanos” (chorizo con algún tipo de carne).

Por su parte, el chorizo verde es perfecto para dar un toque fresco y picante a platos como tacos, quesadillas, salsas y guisos. Su sabor herbal complementa muy bien los ingredientes típicos de la cocina mexicana, como el aguacate, el queso fresco y el maíz.