La Secretaría del Bienestar de México anunció las nuevas fechas para los pagos pendientes de la Pensión del Bienestar, destinada a los adultos mayores beneficiarios del programa de apoyo social, quienes recibirán pagos dobles programados para finales de febrero de 2024. Esta asistencia financiera, que suma cantidades de 6 mil 400 y 12 mil pesos, está diseñada para mejorar la calidad de vida de este grupo vulnerable. Los recursos tienen como finalidad utilizarse para obtener una acceso a necesidades básicas como salud, vestimenta y alimento.
Los pagos dobles de 2024 son una especie de adelanto para los beneficiarios. Las autoridades responsables de coordinar estas pensiones han explicado que la decisión se tomó a causa de la jornada electoral del 2 de junio, cuando se tendrá que elegir al próximo mandatario en la urnas. Las elecciones que se avecinan son consideradas una de las más trascendentes de la historia en México debido a los recursos destinados para gestionarlas.
Las fechas para los pagos dobles de la Pensión del Bienestar
El beneficio económico que proporciona este programa se concentra en reforzar el bienestar de las personas de la tercera edad, cada pago es de forma bimestral a través de las tarjetas bancarias que otorgan las autoridades. La Secretaría del Bienestar pone énfasis en la importancia de este apoyo, reconociendo a los adultos mayores como una prioridad dentro de sus programas sociales. Para este adelanto, se publicó un calendario en redes sociales en el que se estipula el 23 de febrero como la última fecha de los depósitos.
Ariadna Montiel Reyes, líder de la Secretaría del Bienestar, explicó que estos fondos además se extienden a personas con discapacidades, asegurando un soporte financiero más amplio. La anticipación de los fondos para los meses de marzo-abril y mayo-junio responde a la programación de las próximas elecciones federales,. Así, los depósitos comenzarán a distribuirse desde febrero, para evitar coincidir con el período electoral.
La iniciativa busca atender a los mayores de 68 años en todo el país, y a aquellos de 65 años en adelante que residen en municipios con poblaciones indígenas, proporcionando una pensión no contributiva bimestral. Este esfuerzo refleja el compromiso del gobierno de México con el bienestar y la protección social de los adultos mayores, un grupo que históricamente ha enfrentado dificultades económicas y de acceso a servicios esenciales.