¿Se acabó el amor? Así puedes divorciarte si te casaste por la Iglesia Católica en CDMX

El matrimonio religioso tiene un mayor significado para los mexicanos que el realizado por la vía legal, es decir, el que se tramita en el Registro Civil e incluso, se invierte más dinero en su celebración, ya que dentro de la Iglesia Católica la ceremonia representa adquirir un compromiso de fidelidad con tu pareja ante Dios, por lo que no se puede disolver.

Por ello, las parejas que desean separarse normalmente sólo se enfocan en divorciarse por la vía legal; no obstante, pocos saben que sí existe una forma de concluir el matrimonio religioso. Te decimos lo que debes saber.

De acuerdo con la Arquidiócesis Primada de México, a este proceso no se le conoce como un divorcio, sino que se trata de una anulación o invalidación del matrimonio, el cual realiza a través de una solicitud al Tribunal Eclesiástico competente.

El Tribunal Eclesiástico debe proceder con la solicitud según las normas establecidas en el Código de Derecho Canónico, basándose en la veracidad de las partes, de los testigos presentados y de otras pruebas que entreguen los interesados, libres de toda sospecha como son los certificados médicos comprobables y de acuerdo a verdad.

A diferencia del Registro Civil, en el caso de la Iglesia sí se puede negar la anulación o invalidación del matrimonio, lo que impediría que los solicitantes puedan volver a casarse por la Iglesia.

El proceso empieza con la presentación del Escrito Petitorio, el cual debe ser de entre ocho u 10 páginas, escritas a máquina o computadora, tamaño carta, perfectamente legibles y con márgenes, numerando, firmando y fechando cada una de las hojas.

Los documentos que se deben anexar en original y dos copias simples, incluyendo el escrito y la lista de testigos, son:

• Acta del Matrimonio Eclesiástico.
• Acta del Bautismo de ambas partes actualizada con nota marginal.
• Acta del matrimonio civil.
• Acta o Sentencia de Divorcio civil.
• Escritos, cartas o documentos que puedan servir como prueba de la causa. Si son manuscritos, deben presentarse estos mismos, transcritos a máquina y legibles.
• Lista de cuatro testigos, nombres completos, direcciones exactas (incluyendo código postal), números telefónicos. Los testigos deben ser personas dignas de crédito, que conozcan el caso, pueden ser familiares que les consten los hechos, mientras más cercanos, mejor. Los testigos deberán conocer la situación durante el noviazgo y en los primeros tiempos del matrimonio.
• Dos fotografías de los esposos, de preferencia del día de la boda, que no exceda el tamaño carta.
• Copia de identificación oficial y comprobante de domicilio.

Deben existir elementos objetivos para que exista una posible declaración de nulidad, los cuales son detectados en la primera entrevista y se pueden referir a la falta de forma canónica, a la celebración sin haber tramitado la dispensa ante un impedimento o bien, a la existencia de un vicio en el consentimiento.

A esto se suma que los solicitantes deben de cumplir con otros dos requisitos, que son:

• Que el Matrimonio haya sido celebrado en la Ciudad de México.
• Que al menos alguna de las partes tenga el domicilio actual en Ciudad de México.