La cúrcuma, obtenida de una raíz, es comúnmente empleada como condimento en la cocina, otorgando un sabor picante característico a diversos platillos. Sin embargo, su valor excede el ámbito culinario, ya que la cúrcuma es reconocida por sus notables propiedades nutricionales, situándola en la categoría de superalimento.
Entre sus principales beneficios se encuentra su efectiva acción antiinflamatoria, un alto contenido de antioxidantes y propiedades que favorecen la digestión.
Estos efectos saludables de la cúrcuma se atribuyen en gran medida a la curcumina, su principal componente activo, el cual ha sido objeto de numerosos estudios científicos que respaldan sus potenciales aplicaciones terapéuticas.
Es debido a esto que el consumo regular de cúrcuma ha mostrado ser beneficioso para mitigar síntomas asociados a enfermedades inflamatorias como la artritis, la psoriasis o el síndrome de intestino irritable principalmente pero, sin duda, su efecto antiinflamatorio también contribuye a la salud de otros órganos, como es el caso del hígado.
Y es que como sabemos el hígado es uno de los órganos más importantes del cuerpo humano, debido a que, junto con los riñones, se encarga de ayudar a depurar las toxinas y, por lo tanto, desintoxicar al organismo.
Si bien este órgano tiene una impresionante capacidad de regeneración, por lo que puede resistir los daños causados por el alcohol o la mala alimentación, durante muchos años, existen un punto de inflamación crónica donde ya no es posible revertir el daño realizado.
Es por ello que si tu sufres de hígado graso, sobre todo en sus primeras etapas (cuando es posible revertirlo) la cúrcuma puede ser un excelente aliado ya que esta enfermedad suele causar inflamación en el órgano y una de las principales propiedades de la cúrcuma es su efecto antiinflamatorio.
Pero, eso no es todo, sino que el elevado contenido de antioxidantes de la cúrcuma también ayudará a eliminar la grasa acumulado al rededor de la zona y que éste trabaje menos, ya que lo auxilia en su trabajo de desintoxicación.
¿Cómo usar la cúrcuma para limpiar el hígado?
A pesar de que, como mencionamos antes, su consumo regular puede tener beneficios para toda su salud en general, si deseas específicamente usar la cúrcuma para ayuda a limpiar tu hígado y mejorar la salud del mismo estas son algunas de las mejores maneras de consumirlo para dicho efecto.
-Jugos con cúrcuma:
Los jugos pueden ser una excelente manera de aprovechar los beneficios de la cúrcuma sobre todo debido a que en ellos puede combinarse con otros ingredientes que también brinden beneficios para este órgano, tal como es el caso del jugo de la preparación de un jugo de betabel con cúrcuma y limón.
El betabel también contiene compuestos que ayudan a desintoxicar, la cúrcuma tiene propiedades antiinflamatorias y el limón aporta antioxidantes que favorecen la eliminación de la grasa acumulada en el hígado.
-Complementos de cúrcuma:
Aunque muchos no lo saben actualmente la cúrcuma también puede encontrarse en una versión concentrada en forma de cápsulas, las cuáles son una excelente opción para obtener sus beneficios debido a que son fáciles de tomar y dos pastillas al día pueden aportar todos sus compuestos benéficos a tu organismo.
Si bien la mayoría de ellas incluyen un porcentaje de pimienta, si las adquieres, asegúrate de que lo contenga debido a que la pimienta ayuda a activar los compuestos de esta especia.
-Leche dorada (golden milk):
esta es una bebida tradicional que combina leche con cúrcuma y otros ingredientes, como canela o jengibre. Esta debida puede ser una excelente opción para la salud del hígado, debido a que añade otros potentes ingredientes que también contribuyen a su salud y que pueden también ayudar a combatir el hígado graso.
Además la cúrcuma caliente incrementa el potencial de sus antioxidantes. Cabe mencionar que es importan que la prepares con leche vegetal para evitar añadir las grasas saturadas de la leche normal.