Este lunes 12 de febrero, Carlos Slim Helú, el hombre más rico de México, aseguró que la empresa Teléfonos de México (Telmex) ya no es rentable debido a los altos costos que suponen las jubilaciones de los ex trabajadores, sin embargo, descartó vender la empresa de la que es dueño desde el sexenio de Carlos Salinas de Gortari.
Fue justamente Salinas de Gortari quien habló años atrás sobre la venta de Telmex al empresario y como esta compañía de comunicaciones se volvió un monopolio en el sector, al concentrar la mayor parte de la telefonía móvil y de casa.
En un artículo publicado en diciembre de 2014, el presidente mexicano señaló que los márgenes de ganancia de Teléfonos de México duplicaban, en ese momento, la media de los países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Salinas aceptó que tras la privatización y con el paso de los años, Telmex se convirtió en una empresa ineficiente y abusiva.
“Sus precios son demasiado altos: los usuarios mexicanos pagan más que los de la mayoría de los demás países miembros de la OCDE”, dijo el ex presidente hace casi diez años.
Salinas de Gortari señaló que Slim dejó de invertir gradualmente en las telecomunicaciones y gracias a la poca, o nula regulación, del gobierno mexicano, el empresario pudo mantener su hegemonía como proveedor de telefonía e internet.
“Altos costos, precios elevados, mala calidad, pocas opciones actúan contra el bienestar de todos los mexicanos”, escribió el ex presidente en un análisis dos décadas después de vender Telmex a Slim Helú.
El mandatario mexicano (1988-1994), responsable de la venta de Teléfonos de México al empresario de origen libanés, reconoció que el empresario ya contaba con una fortuna considerable antes de la privatización, sin embargo, Slim sí aprovechó la poca regulación en el sector para incrementar sus ganancias en telecomunicaciones.
“Slim no heredó su fortuna de Telmex, sino que aprovechó la falta de regulación neoliberal para consolidarse en el surgimiento de un nuevo sector, la telefonía móvil”, sostuvo Salinas de Gortari en un artículo publicado en El Financiero en 2014.
“Su fortuna descomunal exhibe a gobiernos neoliberales permisivos que durante años mantuvieron una regulación ausente que facilitó su acción monopólica”, concluyó Salinas de Gortari.
Por su parte, Carlos Slim se quejó de que en los últimos sexenios le han negado a su empresa América Móvil la posibilidad de ofrecer televisión de paga.
“Desde hace varios sexenios nos han prohibido la convergencia, lo que afecta a Telmex. Es una empresa con números en rojo que ni siquiera puedo vender”, lamentó ayer el empresario más rico de México.
Luego de ser considerado un agente preponderante, con un dominio mayor al 80% de mercado en telefonía fija y móvil, en los últimos años vio caer su número de usuarios, lo que según el hombre más rico de México, tienen a la compañía en números rojos, al menos hasta el 2040, año en que se espera una recuperación.
Pese a los malos resultados de América Móvil, empresa que concentra las marcas de Telmex y Telcel, la fortuna de Carlos Slim Helú rompió hace unas semanas la barrera de los cien mil millones de dólares.
En una rueda de prensa que ofreció este 12 de febrero en la sede de la Fundación Slim, el magnate atribuyó su reciente éxito a la paridad entre el peso mexicano y el dólar norteamericano, además de otras inversiones.
Señalado por los beneficios de su presunta cercanía con el presidente Andrés Manuel López Obrador, “El Ingeniero” negó que la prosperidad de sus negocios tenga como base los contratos otorgados por el gobierno federal, y expuso que en lo que va del sexenio, sólo le han asignado un tramo de las obras del Tren Maya.