Pese a hoy en día llevar una buena amistad y y ser jugadores fundamentales en el actual esquema de Fernando Gago con las Chivas Rayadas de Guadalajara, en algún momento de su carrera, Víctor Guzmán y Alan Mozo tuvieron ciertas diferencias en el terreno de juego, mismas que en incluso llegaron a fuertes intercambios de palabras.
Tras haber cursado una tercer parte de la fase regular del Clausura 2024, las Chivas han venido de menos a más en las recientes jornadas y teniendo a Víctor Guzmán como uno de los mejores jugadores de la plantilla. Recientemente, el ‘Pocho’ recordó una anécdota con su actual compañero, Alan Mozo, con quien mantiene una buena relación desde su arribo a Verde Valle.
Fue a través del canal de ‘Los Broudys’, donde el ex atacante de los Tuzos se sinceró al mencionar que previo a firmar con el ‘Rebaño Sagrado’ en 2023, Mozo era uno de los futbolistas con los que no llevaba una buena relación. Según señaló Guzmán, sus problemas con el lateral mexicano se suscitaron en 2018, cuando Alan recién disputaba sus primeros partidos como profesional en Pumas; mientras que Víctor defendía los colores del Pachuca.
Un jugador que me caía bien gordo era Alan Mozo cuando estaba en Pumas y es algo que se lo conté. Yo me puse Brackets un viernes {...} y luego jugábamos el domingo contra Pumas, y en la primera jugada del partido, Mozo me estira el brazo y me revienta todos los labios. Con brackets sabes que con cualquier cosita te lastimas; entonces le dije: “Pin... chamaco pend..., me los acaban de poner y ya me reventaste el hocico”.
Posteriormente, el oriundo de Tonalá contó la postura que tomó Mozo tras los insultos y que a raíz de ello, el atacante mexicano se quedó con un mayor coraje en aquel entonces. No obstante, aclaró que en la actualidad, es de sus compañeros más cercanos en las filas del Guadalajara.
Voltea y me dice “Pinc... naco”, así me dijo. Entonces cuando apenas le iba a decir de cosas, salió corriendo y pues yo quede aún más enojado. Pero ahorita Mozo es mi sangre y sabe que lo amo. Yo se lo conté ya después y me dijo: “Pues si, mi sangre, sabes que así es y pues ya, me fui corriendo, ¿Para qué me quedaba a discutir?”, pero hoy en día no me cae mal, es un tipazo.