La papada, conocida también como doble mentón, es una acumulación de grasa que se forma debajo de la mandíbula, un fenómeno que puede estar influenciado por varios factores, entre los que se incluyen el aumento de peso, la genética y el envejecimiento.
Y es que, medida que las personas envejecen, la piel puede perder su elasticidad, lo que contribuye a la aparición de la papada. Además, la disposición genética juega un papel importante, ya que algunas personas pueden estar más predispuestas a desarrollar este tejido adiposo adicional, independientemente de su peso corporal.
A pesar de que en sí misma la papada no presenta un problema de salud, lo cierto es que sí es un factor que puede causar inseguridad en quien la padecen razón por la cual traemos para ti algunos de los remedios naturales que puedes usar para tratar de reducirla sin necesidad de recurrir a alguna intervención quirúrgica.
Modificaciones en tu dieta:
Si bien por predisposición genética puede haber personas delgadas que también tengan papada, lo cierto es que esta suele aparecer principalmente como consecuencia de un aumento de peso, por lo que el primer paso para combatirla es realizar cambios en tu alimentación, aumentando el consumo de fibra así como de frutas y vegetales.
También se recomienda evitar alimentos ricos en grasas y azúcar, los cuales favorecen la acumulación de grasa.
Realizar ejercicios faciales
Mejor conocidos como yoga facial, realizar ejercicios específicos para esta zona puede ser una excelente herramienta para combatir la grasa que se acumula en esta zona. Aquí te dejamos algunos que puedes realizar.
-Estiramiento de cuello: Inclina la cabeza hacia atrás hasta mirar al techo y mantén la posición durante 10 segundos.
Repetición: 10 veces
-Besos al cielo: Levanta la cabeza hacia el techo y frunce los labios como si dieras un beso; mantén la posición durante 10 segundos
Repetición: 10 veces
-Movimientos de lengua: Saca la lengua lo más que puedas hacia abajo y luego hacia arriba
Repetición: 10 veces en cada dirección
Aplicación de mascarillas y uso de masajes
Las mascarillas ya sea con productos naturales como miel, yogurt, aguacate, entre otros, y en general, de alimentos que estimulen la generación de colágeno, ayudarán a que esa parte de la piel recobre elasticidad, lo cual contribuye a mejorar al apariencia de esta zona.
Por su parte, una manera de potencializar sus efectos es aplicarlas al mismo tiempo que realizas masajes en forma ascendente en la zona, lo cual ayudará a estimular y remover la grasa acumulada así como incrementar la circulación sanguínea que también favorezca el movimiento y reducción de la grasa.
Suplementación de vitaminas
Aunque no lo creas existen algunas vitaminas que pueden ser tus aliadas para combatir este problema estético, tal como es el caso de la vitamina E, la cual aporta una gran dosis de antioxidantes que actúan y tienen beneficios específicamente en la piel, por lo que consumirla de manera regular, sobre todo durante un proceso de perdida de peso, puede ayudarte.
Aplicar hielo en la zona
Es sabido que el hielo o el frío en sí puede estimular la producción de colágeno y brindar una apariencia más saludable a la piel, razón por la cual aplicar un poco en esta zona puede ayudar a estimular la quema de la grasas y, a su vez, hacer que se genere más colágeno. Una de las mejores maneras de aplicarlo es usar un cubo de hielo y dar masajes ascendentes o circulares en la zona.
Recuerda que un factor clave para tener buenos resultados es la constancia por lo que para que realmente puedas notar un cambio debes aplicar estos consejos de manera rutinaria hasta notar cambios.