La historia de Leticia Rodríguez Lara puede contarse a partir del año 2012 cuando llegó a Quintana Roo con el uniforme de la Policía Judicial Federal de la entonces Procuraduría General de la República (PGR), de la cual la corrieron y tiempo después se sumó a las filas del Cártel de Sinaloa para liderar sus intereses por conquistar la “joya del caribe” por su importancia estratégica para el crimen organizado: esta es la historia de “Doña Letty”, la líder del Cártel de Cancún.
Su trabajo como policía incluía el combate contra el tráfico de drogas, entre otros delitos federales, por eso no desconocía el mundo del narcotráfico que terminaría por adoptarla para convertirse en una de la piezas claves en la guerra entre el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Desde que comenzó a operar en Cancún se encargó de la distribución de drogas con ayuda de los nexos que tenía de su pasado en la Policía Federal; también incursionó en los delitos de tráfico de migrantes, secuestros, asaltos, prostitución y extorsión de negocios.
Quizá uno de los puntos más álgidos de su historia criminal ocurrió cuando se le consideró como una de las principales responsables del incremento de la violencia en los municipios de Cancún, Playa del Carmen y Tulum: la razón, frenar la avanzada de Nemesio Oseguera Cervantes.
La también llamada “Reina de la Riviera Maya” o “La 40″ estuvo al frente de la “defensa” de la plaza del Cártel de Sinaloa ante las células de Los Zetas y del Cártel del Golfo en Quintana Roo; sin embargo, fue el 16 de enero de 2017 cuando se confirmó su poder al enfrentarse a sicarios del CJNG en el Bleu Parrot de la Riviera Maya con un saldo de cinco muertos y 15 heridos.
El poder de “Doña Letty” era tal que creó su propia organización, el Cártel de Cancún, lo que provocó una alianza de sus rivales para disputarle la plaza y a la que se sumaron células de los cárteles de Sinaloa, CJNG, Golfo y Los Zetas que se hicieron llamas “Los Combos”.
“Doña Letty” favorecida por la impunidad
A pesar de ser considerada como una de las mujeres más poderosas dentro del mundo del narcotráfico y ser detenida en 2017, “Doña Letty” recuperó su libertad luego de cinco años en prisión.
Los motivos para que un juez le devolviera su libertad tienen que ver con la desestimación de una prueba probatoria, lo que generó una absolución a los delitos de venta y distribución de cocaína, portación de armas de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas y delincuencia organizada.
La absolución a la líder del Cártel de Cancún ocurrió a pesar de identificarla como la encargada de diseñar las rutas que utilizaba El Chapo Guzmán para enviar cocaína desde Colombia a uno de los principales centros turísticos del país.
Luego de su separación del Cártel de Sinaloa se presume que se convirtió en jefa de plaza para el Cártel del Golfo e incursionó en más delitos relacionados con el cobro de piso; en el año 2015 su nombre circuló en los medios nacionales al ser señalada por un presunto integrante de Cártel de Sinaloa como “la jefa” de una red de taxistas, vendedores ambulantes y trabajadores de comercios y hoteles que operaban para el Cártel de Cancún.
Para esconder todo el dinero que obtenía del crimen organizado, “Doña Letty” echó mano de la empresa First National Security, dedicada al alquiler de cajas de seguridad y que las autoridades detectaron más de 800 en poder de prestanombres y en cuyo interior tenían dinero, joyas y bienes de los que no pudieron acreditar su legalidad.
El caso de las cajas de seguridad de “Doña Lety” terminó en uno de los más escandalosos por la violación al debido proceso porque la FGR no contaba con autorización para revisar el contenido de las mismas: el resultado fue que muchas personas perdieran sus bienes a manos de las autoridades; una lluvia de amparos en contra de la Fiscalía por vulnerar sus derechos humanos y un escándalo internacional cuando la CNDH demandó a las autoridades la protección de los afectados.