Miguel Ángel Treviño Morales, identificado como presunto líder de Los Zetas, negó su pertenencia a dicho grupo criminal a través de una carta enviada a Milenio.
En el texto, compartido con dicho medio para ejercer su derecho de réplica, expresó que las autoridades lo absolvieron en 2019 del delito de delincuencia organizada y pidió que su nombre deje de ser asociado al alias ‘El Z-40′. “Yo no soy esa persona que mencionaron los testigos protegidos”, sostuvo.
Cabe recordar que en 2022 Treviño Morales obtuvo el amparo de un tribunal federal para no ser juzgado más de una vez por el mismo ilícito.
“El delito de delincuencia organizada, en esos espacios de tiempo y zonas geográficas, ya fue materia de juzgamiento, y por tanto juzgarlo nuevamente por delincuencia organizada desde luego que vulnera ese principio de non bis in idem”, declaró en ese entonces el magistrado presidente José Manuel Quistián Espericueta.
En la carta compartida con Milenio, este individuo argumentó que, en todo caso, su vinculación con el apodo de ‘El Z-40′ se debería a una homonimia o similitud en el nombre. “Utilizaré todos los medios legales a mi alcance para realizar esta precisión”, añadió.
Específicamente, se refirió a las declaraciones de testigos como Yeraldín, Rafael y Mateo Díaz López, de las cuales el juez no pudo advertir un señalamiento firme en su contra. Además, al tenerlo de frente, supuestamente no lo habrían reconocido, lo cual sembró dudas en el proceso.
Sumado a esto, detalló que no existe alguna orden de aprehensión en su contra por la masacre de 200 migrantes en San Fernando, Tamaulipas, cuyos cuerpos fueron hallados en fosas clandestinas en 2010. “Soy inocente hasta que se demuestre lo contrario”, aseveró.
Treviño Morales fue detenido en julio de 2013 en Nuevo Laredo, Tamaulipas. Para esa época, el gobierno de México ofrecía 30 millones de pesos por su captura y la administración de Estados Unidos daba cinco millones de dólares.
Desde su arresto, ha pisado varias de las más reconocidas prisiones federales, como son las del Altiplano, Puente Grande, Oaxaca, Hermosillo, Ciudad Juárez, el Cefereso 17 de Michoacán y el Cefereso 15 de Chiapas.
En enero obtuvo una suspensión provisional que frenó momentáneamente el proceso de su extradición, pero no pudo conseguir la suspensión definitiva. En este sentido, fue trasladado al Centro Federal de Readaptación Social Cuatro “Noreste” en Tepic, Nayarit, donde actualmente se encuentra.