Migrantes huyen de Chiapas para evitar el reclutamiento forzado del CJNG

Producto de la violencia que desataron el Cártel de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG) por el control de la plaza en la frontera entre Chiapas y Guatemala, en todo el año 2023 más de tres mil personas dejaron sus hogares para escapar del campo de batalla en que convirtieron las organizaciones criminales varios municipios del estado: Chicomuselo, Frontera Comalapa, Motozintla y Nueva Palestina, entre los más afectados.

A pesar de los más de 17 mil militares desplegados entre 2022 y 2023 para ayudar a las labores de seguridad pública en Chiapas, elementos del Cártel de Sinaloa y CJNG siguen arribando a la región y provocando enfrentamientos que tienen en el medio del conflicto a los pobladores, muchos de los cuales decidieron abandonar sus hogares para no sufrir la violencia y escapar del reclutamiento forzado a manos del crimen organizado.

A principios del 2024 los pobladores de Chicomuselo relataron que miembros del Cártel de Sinaloa y CJNG levantaron una especie de censo criminal en las comunidades de la región para identificar a las familias que cuentan con miembros con capacidad para incluirlos en sus filas; de negarse a “trabajar” como halcones y para efectuar bloqueos carreteros, los amenazaban, les cortaban luz, agua e internet, o los asesinaban.

Unas semanas después, pobladores de las comunidades de Galicia, 20 de Noviembre y El Cerillo, Chicomuselo, salieron en busca de refugio con destino al poblado de Las Flores.

Cargados con algunas pertenencias y poca comida, columnas de niños, mujeres y hombres se sumaron a las más de dos mil personas que el 17 de enero abandonaron los municipios de La Concordia, Socoltenango y Chicomuselo luego de la intervención de militares de la 39 Zona Militar trataron de liberar los caminos que los propios habitantes bloquearon para evitar el paso de las fuerzas del orden.

Ahora acusaron que integrantes del grupo criminal conocido como MAIZ, presuntamente vinculado al CJNG, está reclutando a niños y adolescentes para sumarlos a las filas del crimen organizado.

Conviene señalar que en el enfrentamiento entre el Cártel de Sinaloa y el CJNG, Nemesio Oseguera Cervantes, líder del cártel de las cuatro letras echó mano del grupo MAIZ (Mano Izquierda) para intentar frenar la llegada de los sinaloenses a la frontera con Guatemala.

Esta batalla se intensificó en septiembre del año pasado cuando un convoy del Cártel de Sinaloa atravesó comunidades de Chiapas para dirigirse a la zona de La Trinidad-Comitán y La Trinidad-Chamic en medio de aplausos de sus pobladores; la escena se repitió en los siguientes meses en distintas regiones de la Sierra de Chiapas.

Así, organizaciones defensoras de derechos humanos han señalado que la población de Chiapas no sólo se enfrenta al problema de la pobreza extrema, falta de empleo y bajo nivel de educación, sino también a la embestida de los cárteles que intentan dominar la puerta de entrada de la droga proveniente desde Guatemala.

Según un estudio del Centro para los Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas, entre el año 2010 y 2023 más de 20 mil personas han abandonado la región por alguna de las causas anteriores o a consecuencia de todas juntas.