Estando en año de elecciones presidenciales, cada vez es más común ver diversas publicidades de campañas electorales por parte de Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez; sin embargo, un tema que no poco sale a relucir, son los gustos deportivos de los contendientes.
No obstante, es bien sabido que la candidata de la oposición es una fiel seguidora del Cruz Azul y del futbol en general, prueba de ello fue su presencia en la Copa del Mundo de Alemania 2006, en donde compartió su pasión y sufrimiento por la derrota de la Selección Mexicana durante los octavos de final ante Argentina.
Si bien, el nombre de Xóchitl Gálvez comenzó a tener más revuelo en los últimos diez años, su incursión en el mundo de la política radica de muchos más años atrás. Fue a principios del nuevo milenio cuando la actual contendiente a la presidencia, con ayuda del ex presidente de México, Vicente Fox, pudo acudir al encuentro del Tricolor en la ciudad de Leipzig, Alemania y ver la eliminación ante la ‘Albiceleste’.
Pocos recuerdan la imagen de Gálvez en uno de los palcos de la Arena Red Bull con la camiseta de la Selección Mexicana y acompañada del entonces presidente de la FIFA, Joseph Blatter, así como de la leyenda del futbol alemán, Franz Beckenbauer; sin embargo, la misma oriunda de Hidalgo contó para el podcast El Calambre lo que fue esa experiencia y la forma en que se presentó en el palco.
Me fui al Mundial de Alemania 2006. Yo estaba en un evento de las Naciones Unidas en Ginebra y le llamé al presidente Fox y le dije que si me dejaba ir el fin de semana al Mundial porque jugaba México contra Argentina (octavos de final). Yo estaba al lado de Beckenbauer, pero yo iba como “Hooligan” toda pintada y así, pero cuando vi que estaba en el VIP porque yo iba en representación del presidente, yo seguí tal cual iba.
Posteriormente, Xóchitl recordó que tras el pitazo final y concretarse la eliminación del combinado azteca gracias al golazo de Maxi Rodríguez, no pudo contener su tristeza y estalló en llanto. De la mano, mencionó que fue el mismo Beckenbauer quien la consoló y le dio ánimo para alzar la cara y superar el trago amargo de aquella tarde del 24 de junio del 2006.
Yo iba como una Hooligan, pero cuando perdió México, me consoló Beckenbauer por mi llanto. Yo lloraba y lloraba, pero el me fue a consolar porque ni siquiera me podía levantar del dolor por haber perdido y quedar eliminados de ese Mundial (2-1 favor Argentina). Entonces pues si fui a ese Mundial, pero además me tocó estar en el estadio; a pesar de todo, la prensa no me golpeó porque sabían que a mi me gusta el futbol y aunque Fox me consiguió los boletos, yo pagué todo el viaje con mi dinero.