El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de San Luis Potosí compartió por medio de sus redes sociales oficiales que tras emprender labores de una obra de regeneración urbana de la calzada de Guadalupe, se localiza justo debajo del adoquín, algunos niveles de emprendados, los cuales de acuerdo con el instituto pertenecen a los siglos XIX y XVII.
De acuerdo con lo compartido por el INAH, el cambio de año entre el 2023 y lo poco del 2024 trajo consigo una serie de trabajos de regeneración urbana que estuvieron a cargo del ayuntamiento de la capital del estado, además de que reiteraron que desde los inicios de las obras ellos han tenido participación, supervisando y revisando cada parte del proceso.
Como resultado de las obras emprendidas sobre las calles de San Luis Potosí, se localizó un empedrado a poca profundidad del actual nivel de la calle; sin embargo, después de ejecutar una exploración en distintas áreas de la misma calle Colón, se comprobó que en el área hay más empedrados en diferentes niveles de profundidad y que están a pocos centímetros de los adoquines.
Una vez que el INAH comprobó que se trataban de vestigios antiguos, en ese momento se iniciaron las labores de rescate arqueológico, además de que cuya cronología permite ubicar estos trabajos dentro de la arqueología histórica de San Luis Potosí.
Vestigios que se encontraron durante obras en SLP
Cabe mencionar que las últimas cuatro excavaciones efectuadas en el mes de enero han permitido recuperar los vestigios materiales de algunos momentos pertenecientes a la historia virreinal e independiente de lo que fuera el extremo sur de la ciudad potosina.
El empedrado más antiguo que se localizó sobre el terreno natural, está constituido por cantos rodados y piedras alargadas y angostas, ambas unidas por un mortero de cal con arena.
El segundo empedrado que se localizó se ubica sobre el mencionado anteriormente, en su construcción se utilizaron cantos rodados de tamaño regular y rocas de cantera parcialmente labradas.
Según lo planteado por el INAH, este empedrado con diseño de rombo se puede ubicar para el siglo XIX, muy probablemente para la segunda mitad de este periodo. En la superficie se puede percibir el paso de los años, por medio de distintos surcos que siguen el sentido de la calle dan cuenta del paso, en aquel entonces, de carretas, caballos y seguramente de los primeros automóviles que circulaban allá por el siglo XIX.