El plantón de Reforma en 2006 fue un evento significativo en la carrera política de Andrés Manuel López Obrador, quien actualmente es el presidente de México. Este plantón se originó como respuesta a los resultados de las elecciones presidenciales en las que Felipe Calderón resultó ganador por un estrecho margen, lo que generó controversia y acusaciones de fraude electoral por parte del oriundo de Tabasco, sus compañeros políticos y sus seguidores.
Durante varios meses, miles de simpatizantes de López Obrador ocuparon una de las principales avenidas de la Ciudad de México, Paseo de la Reforma, así como el Zócalo capitalino, estableciendo campamentos y realizando diversas manifestaciones para exigir un recuento total de los votos.
Esta movilización masiva no solo tuvo un impacto en la vida cotidiana de la ciudad, alterando el tráfico y las actividades comerciales, sino que también marcó un antes y un después en el ámbito político mexicano.
Hoy, 18 años después de ese evento, la manifestación ha sido tema de conversación nuevamente luego de que saliera a la luz información que revela que el Cártel de Sinaloa financió la campaña de AMLO, a la que le habría inyectado al menos 2 millones de dólares.
“La Barbie” y el plantón de Reforma
Bajo la famosa consigna “¡Voto por voto, casilla por casilla!”, el plantón que empezó con una megamarcha que AMLO convocó en el corazón de la capital logró reunir a más de un millón de personas en lo que en su momento fue la mayor protesta de la que se tuviera registro en la ciudad capital.
Ya en el plantón, aunque no se tiene la cifra oficial se dice que el número de participantes fue de cientos de miles.
“Les propongo que nos quedemos aquí, en asamblea permanente (…) que permanezcamos aquí, día y noche, hasta que se cuenten los votos y tengamos un presidente electo con la legalidad mínima que nos merecemos los mexicanos”, dijo el entonces perredista.
El plantón de Reforma en 2006 comenzó en julio, poco después de las elecciones presidenciales del 2 de ese mes, y tuvo una duración de aproximadamente 47 días, concluyendo el 14 de septiembre de 2006.
A pesar de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ratificó los resultados de las elecciones, el movimiento liderado por López Obrador logró mantenerse activo y crítico frente al gobierno de Calderón, lo que eventualmente contribuyó a la fundación del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en 2014, partido político con el cual ganaría la presidencia en 2018.
El plantón demostró la capacidad de López Obrador para movilizar a grandes sectores de la población y consolidar su base de apoyo, convirtiéndose en una figura central de la oposición.
Sin embargo, este martes una investigación publicada por ProPublica además de revelar que el Cártel de Sinaloa dio 2 millones de dólares a la campaña del tabasqueño y que Édgar Valdez Villarreal, alias “La Barbie”, intentó secuestrar al entonces presidente del Tribunal Electoral, Leonel Castillo González, también detalló un dato más vinculado al plantón.
Y es que la agencia señala que “La Barbie” también financió la manifestación, esto de acuerdo con el testimonio de quien fue su abogado, Roberto López Nájera, quien se convirtió en un testigo protegido de la DEA.
“Después de haber insistido en que era el legítimo ganador, López Obrador reunió a miles de sus partidarios en la Ciudad de México para una sentada de un mes que cubrió una franja del centro colonial de la capital. Según López Nájera, “La Barbie” donó fondos para ayudar a alimentar a los manifestantes”, se lee.
Anteriormente otras versiones, como la de Elena Chávez en el libro El Rey del Cash, señalaban que el plantón de Reforma había sido financiado con recursos públicos y además no todos eran seguidores del hoy presidente, pues según también se había obligado a vendedores ambulantes, trabajadores de limpia, sindicalizados del Gobierno a asistir.