La Gran Tenochtitlán, emblemática ciudad que impresionó a los europeos cuando la vieron por primera vez, cayó oficialmente el 13 de agosto de 1521, marcando así el fin de una era en la historia de nuestro país. La nación pasó a llamarse Nueva España y un nuevo sistema de gobierno fue instaurado por los europeos.
Pero antes de que eso sucediera, la realidad es que Moctezuma, penúltimo gobernante de la ciudad, y Hernán Cortés, líder del ejército español y quien se convirtió en el conquistador, tenían una relación, por lo menos, cordial.
Y es que mucho se ha contado sobre los encuentros entre ambos personajes, y es bien conocida la historia de un robo efectuado por los europeos, quienes se encargaron de llevarse el importante tesoro de Moctezuma, mismo que, hasta nuestros días, todavía no aparece en su totalidad.
¿Qué era el tesoro de Moctezuma y dónde estaba?
A su llegada a Tenochtitlán, Hernán Cortés fue muy bien recibido por Moctezuma, Huey Tlatoani de los mexicas que mantenía el orden en la ciudad. Las crónicas aseguran que cuando el español arribó, en el año 1519, fue hospedado en el palacio de Axayácatl, un lugar donde, hoy en día, se alza el icónico Monte de Piedad de la Ciudad de México.
Fue en dicho edificio donde Hernán Cortés y parte de sus hombres más cercanos encontraron una habitación secreta donde hallaron lo inimaginable: un botín de fabulosos objetos hechos de valiosos materiales como el oro. Se cuenta, que este tesoro no podía ser tocado por el tlatoani y que, al contrario, lo único que podía hacer era agrandarlo aún más, tal cual lo había hecho su abuelo y su padre.
Entonces fue cuando la “buena” relación entre los españoles y mexicanos se rompió, pues Cortés hizo prisionero a Moctezuma y, en una emergencia, tuvo que salir de Tenochtitlán, lo que provocó que los mexicas iniciaran una revolución.
Tras volver de su viaje, Cortés intentó calmar la situación con los ciudadanos mexicas obligando a Moctezuma a que intercediera por él; no obstante, se cuenta que esto no funcionó y que de hecho provocó la muerte del tlatoani.
Ante el miedo de lo que pudiera ocurrirle al tesoro robado, Hernán Cortés organizó una salida discreta de Tenochtitlán, por supuesto, con el botín bajo el brazo; sin embargo, una mujer que los vio huyendo puso sobre aviso a todo el pueblo y aquello significó una dura batalla y la derrota del ejército español, además de la recuperación del tesoro por parte de los mexicanos.
Lo que ocurrió con los valiosos objetos es, hoy en día, todavía un tema que provoca debate. Se dice que los mexicas decidieron arrojar al lago todo lo que, por años, Moctezuma, su padre y su abuelo, habían recolectado como parte del tesoro de un imperio.
Sobre el robo, el libro La Versión de los Vencidos recoge crónicas de indígenas que dicen: “Y cuando hubieron llegado a la casa del tesoro, llamada Teucalco, luego se sacan fuera todos los artefactos tejidos de pluma, tales como, travesaños de pluma de quetzal, escudos finos, discos de oro, los collares de los ídolos, las lunetas de la nariz; hechos de oro, las grebas de oro, las ajorcas de oro, las diademas de oro (...) y anduvieron por todas partes, anduvieron hurgando, rebuscando la casa del tesoro, los almacenes, y se adueñaron de todo lo que vieron (...) rebuscan en la casa de almacenamiento de Motecuhzoma y le quitan todo lo que le pertenece”
¿Cómo murió Moctezuma?
Una de las versiones más extendidas, proveniente de relatos españoles, sugiere que Moctezuma fue asesinado por su propio pueblo. Según esta narrativa, los mexicas, enfurecidos por la continua sujeción a los españoles y por ver a su emperador en un estado de sumisión, lo atacaron con piedras y flechas durante un intento de apaciguar una revuelta, lo que eventualmente provocó su muerte días después debido a las heridas sufridas.