Desde el año 2019 la Administración para el Control de Drogas (DEA) reveló que Nemesio Oseguera Cervantes -”El Mencho”-, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) había construido su propio “triángulo dorado” en los estados de Jalisco, Colima y Michoacán, desde donde, escondido en la montaña, controlaría todas las actividades criminales del cártel de las cuatro letras.
Las montañas de la Sierra Madre del Sur no sólo facilitarían a “El Mencho” un gran escondite y de difícil acceso para su rivales y las fuerzas federales; su posición geográfica también lo coloca cerca de los dos principales puertos cargueros del pacífico: Manzanillo, Colima, y Lázaro Cárdenas, Michoacán.
A sus 57 años y con una insuficiencia renal que amenaza su vida, el líder del CJNG estaría siguiendo más los pasos de Ismael El Mayo Zambada que los de Joaquín El Chapo Guzmán; después de su arresto en Estados Unidos y su regreso a México para liderar el CJNG, “El Mencho” se convirtió en un hombre precavido, poco protagonista y acostumbrado a evitar las grandes ciudades para convertirse en el “nuevo señor de la montaña”.
Al menos así lo describe un corrido de loa Plebes del Rancho: “pocos conocen su rostro, raro baja a los poblados, se mueve en las montañas, de allá arriba mueve todo”, dice la letra de la canción.
Violencia en el escondite de “El Mencho”
Es justo la frontera entre Michoacán y Jalisco una de las más violentas desde hace unos años a la fecha, la llamada Tierra Caliente concentra municipios como Tepalcatepec, Sahuayo, Mazamitla, Buenavista Tomatlán, Apatzingán, Nueva Italia, Aquila y Aguililla -la presunta cuna de “El Mencho”- son también unos de las demarcaciones con mayor actividad criminal.
Y es que desde que el CJNG comenzó a cobrar relevancia para las autoridades estadounidenses por sus actividades criminales, también se acentuó la violencia por el control de la zona fronteriza entre Colima, Michoacán y Jalisco; en el año 2019 la ofensiva de “El Mencho” para avanzar por el oeste de Michoacán logró reunificar a los Cárteles Unidos.
Si bien su historia se remonta a una primera alianza del Cártel del Milenio, Cártel de Sinaloa, Cártel del Golfo, CJNG y de los Caballeros Templarios para expulsar de Michoacán y Jalisco a los Zetas; la versión más reciente de Cárteles Unidos se dio para frenar a los hombres de “El Mencho” en su guerra por Tierra Caliente, lo que unificó a organizaciones como el Cártel de Tepalcatepec y Los Viagras en contra de “las cuatro letras”.
El escondite de “El Mencho”
Después del hackeo de Guacamaya Leaks a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se reveló que las autoridades mexicanas lograron rastrear a varios de los hombres más cercanos al líder del CJNG hasta las inmediaciones de las comunidades de Las Hormigas, Murguía y Aranjuez en Talpa de Allende, Jalisco, un municipio ubicado a los pies de la cadena montañosa que lo separa de Puerto Vallarta.
Los reportes de la Sedena coinciden con los de la DEA, “El Mencho” se esconde entre los límites de Jalisco, Colima y Michoacán, pero constantemente cambia de domicilio para no ser rastreado cuando las autoridades siguen a uno de sus lugartenientes: hoteles, casas de seguridad, cabañas y ranchos completamente custodiados por sus hombres.
Pero la DEA añade que el líder del CJNG no consume drogas y tiene la disciplina de un militar; no va restaurantes y pagas las cuentas de todos -como se rumora que lo hacía El Chapo Guzmán-; sin embargo, la enfermedad que padece y -se presume- lo tiene postrado varios días en la cama podría desatar una guerra interna por sucederlo. Hasta el momento los intentos (rumores) de matarlo son tres.