Después de la reunión con autoridades estatales en Palacio de Gobierno de Chihuahua, el activista Julián LeBarón reveló en entrevista con Infobae México que junto con los cuatro miembros de su comunidad, presuntos criminales también tenían secuestrada a otra persona.
Además de Shem Lamar Stubss Gwin, Christian Bruce LeBarón Johnson —liberados la madrugada del 23 de enero—, Miguel Ángel Moreno Sánchez y Manuel Horacio Ríos Jacobo, un grupo de posibles miembros del Cártel de Sinaloa se llevó al dueño de una llantera de identidad reservada.
Los hechos ocurrieron en la zona conocida como El Largo Maderal, Chihuahua, en medio de un paseo en motocicleta. “Iban por la sierra en sus motos, porque son aficionados de las motocicletas. Lo que pasó es que la moto de mi hermano [Christian Bruce] se descompuso y ellos fueron a la gasolinera a comprar aceite, porque le pegó una piedra y estaba tirando aceite”, narró Julián durante la conversación con este medio.
Aparentemente, los presuntos miembros de la estructura criminal confundieron al grupo con “halcones” de un bando rival y decidieron llevárselos. “En la gasolinera los secuestraron y a mi hermano lo dejaron solo seis horas, después fueron por él”.
Durante el periodo que Shem y Christian estuvieron privados de su libertad, los responsables de su retención los tuvieron amarrados “con los ojos vendados, prendían motosierras y afilaban cuchillos junto a ellos, básicamente los estaban aterrorizando y lo hacían para burlarse de ellos”.
A causa de las agresiones que sufrió, Shem tuvo que ser hospitalizado y, según contó Julián LeBarón, tuvo un breve infarto dentro de la unidad médica.
Sobre el paradero de las personas que aún no han sido localizadas, las autoridades de Chihuahua dijeron durante la reunión que tenían noticias de que “los van a liberar pronto”, información que habría sido proporcionada por Christian y Shem.
Sin embargo, los integrantes de la familia LeBarón temen que con esto el gobierno estatal se deslinde de realizar las acciones de búsqueda necesarias para efectuar el rescate.
Por tal motivo, le dieron a las fuerzas de seguridad un plazo de 24 horas para localizar a los que permanecen sin ser hallados. “Si en ese tiempo no los encuentran, nosotros vamos a buscar estrategias y soluciones que no sean el gobierno del estado”, aseveró Julián.
“Como ciudadanos no podemos permitir la incompetencia cuando la vida de nuestras familias está de por medio”, manifestó el activista. En este sentido, la comunidad advirtió que incluso se ha considerado la opción de tomar el Puente Internacional de Las Américas en caso de que no haya un avance en el caso.
“Nosotros no queremos afectar a terceros, pero cuando la vida está de por medio se vale reclamar”, expresó el entrevistado.