Éste era el método de comunicación favorito de ‘El Chapo’ Guzmán, líder del Cártel de Sinaloa

Las consecuencias por ingresar al negocio de las drogas son cuantiosas. Es sabido que aquellos que se han convertido en líderes de las organizaciones criminales más poderosas de México tienen que “sacrificar” su libertad y estabilidad al tener que estar en constante movimiento; pero eso no es todo. Los capos suelen tener pocas oportunidades para comunicarse con sus seres queridos y, en caso de hacerlo, deben de ser extremadamente cuidadosos. Una pequeña falla puede causar su caída.

Uno de los narcotraficantes reconocido por haber respetado esa regla a lo largo de su trayectoria criminal es Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, ahora ex líder del Cártel de Sinaloa. Al menos así lo demuestran diversos reportes de las autoridades de Estados Unidos, que, pese a los esfuerzos del capo por pasar inadvertido, lograron identificar cuál era su método de comunicación preferido.

Y es que al ser líder de uno de los cárteles más activos no sólo de México, sino de toda la región, ‘El Chapo’ requería estar constantemente en contacto con varios miembros de la organización; desde productores y transportistas de drogas, hasta agentes del orden, proveedores y lugartenientes.

Fue así como en 2012 la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) realizó uno de los hallazgos más importantes para concretar la captura del originario de Badiraguato: Guzmán Loera utilizaba un teléfono celular BlackBerry pero no sólo para cuestiones laborales, sino también para estar en contacto con miembros de su familia y otras personas.

En 2014, The New Yorker dio a conocer que la DEA intentó rastrear a Guzmán Loera por un largo tiempo a través del monitoreo de líneas telefónicas. Sin embargo, en el narcotráfico raramente se hacen llamadas o envíos de correos electrónicos.

Finalmente, las autoridades estadounidenses comprendieron que ‘El Chapo’ desconfiaba ―como la mayoría de los criminales― de los teléfonos satelitales fabricados en Estados Unidos. En lugar de eso, el ahora otrora narcotraficante prefirió utilizar dispositivos de la compañía canadiense BlackBerry, mismos que eran cifrados por expertos en informática para hacer todavía más segura la comunicación.

Una vez hecho éste descubrimiento, la DEA logró localizar el dispositivo personal de Guzmán Loera y con ello consiguieron no sólo interceptar sus mensajes, sino también triangular su señal de geolocalización. Pero ‘El Chapo’ siempre estaba un paso adelante cuando se trataba de evadir a la justicia.

Durante un operativo realizado en Los Cabos para dar con su captura, “en algún momento Guzmán debió darse cuenta de que su BlackBerry había sido comprometida y decidió aprovechar este revés. Se reunió con un subordinado y le dio el BlackBerry”, señaló el periodista Patrick Radden en su reportaje ‘La caza de El Chapo’.

Después de ese suceso, ‘El Chapo’ se volvió más estricto e incluso parece que por cierto tiempo permaneció completamente incomunicado, dependiendo de lugartenientes o subordinados que recibían y enviaban mensajes a su nombre. Tiempo después las autoridades de México y Estados Unidos identificaron que había encontrado una solución aceptable.

“Si necesitaba comunicarse con el jefe, podía comunicarse con él a través de BBM, la aplicación de mensajería instantánea de BlackBerry. Sin embargo, su mensaje no iría directamente a Guzmán, sino a un lugarteniente de confianza, que pasaba sus días en cafeterías Starbucks y otros lugares con Redes inalámbricas públicas”, reveló The New Yorker.

Guzmán Loera finalmente fue detenido el 22 de febrero de 2014 por elementos de la Marina en Mazatlán, Sinaloa. Recuperó su libertad brevemente el 11 de julio de 2015, pero fue encarcelado definitivamente el 8 de enero de 2016.

Parte de los mensajes interceptados de su BlackBerry fueron hechos públicos durante el juicio en su contra, realizado en Nueva York, EEUU, luego de que el FBI lograra la captura de Cristián Rodríguez, un joven informático originario de Colombia que elaboró una red cifrada para 100 teléfonos que posteriormente entregó al Cártel de Sinaloa.

Guzmán Loera actualmente se encuentra recluido en ADX Florence, una prisión de máxima seguridad ubicada en Colorado.