El presidente Andrés Manuel López Obrador reaccionó al fallecimiento del escritor mexicano José Agustín, quien murió ayer a los 79 años de edad y a pocas semanas de que se reportó que tenía mal estado de salud, derivado de las secuelas que le dejó el accidente que sufrió en el 2009.
En su conferencia mañanera de hoy, López Obrador lamentó la muerte del escritor, expresando su respeto y admiración por sus textos, los cuales considera que son de lectura obligada.
“Lamentamos mucho el fallecimiento el gran escritor José Agustín. Para los jóvenes son muy recomendables sus textos, porque mezclaba la parte cultural con la política, escribía para jóvenes.
“También sus textos, se llamó la tragicomedia obligada, son de lectura obligada para comprender como funcionaba el régimen autoritario y la corrupción que imperaba son textos muy buenos y un abrazo a sus familiares a sus amigos, un gran, gran escritor mexicano”, dijo en Palacio Nacional.
El presidente reconoció el trabajo de José Agustín como escritor de tragicomedia mexicana, afirmando que relató “como pocos” los hechos históricos.
“Yo me quedo con la tragicomedia mexicana porque tiene cosas excepcionales, hace un relato del funcionamiento del sistema político mexicano, de los acuerdos que se hacían entre el poder económico y el poder político, narra como pocos, como después de que hay un enfrentamiento y el gobierno del general Cárdenas y la oligarquía de antes, sobre todo el Grupo Monterrey, al llegar Ávila Camacho, aunque el Grupo Monterrey y otros grupos económicos habían apoyado a Almazán en la elección presidencial.
“Al llegar Ávila Camacho que era moderado, se reúnen con el nuevo presidente y pactan para que el Estado les apoye, no pagan impuestos, con créditos baratos, y llegan a confesar que ya era distinto el gobierno, que no se podían entender con el general Cárdenas, pero con Camacho sí, lo cuenta de manera magistral y son historias que se repiten”, puntualizó.
José Agustín murió ayer, a los 79 años de edad, a varias semanas de que su familia informó que tenía un estado de salud delicado, por lo que incluso, uno de sus hijos pidió a los seguidores de sus papá que rezaran por él y pocos días después, anunció que un sacerdote le dio la unción de los enfermos.
En el 2009, el escritor sufrió un accidente en el Teatro de la Ciudad de Puebla, donde se fracturó varias costillas y el cráneo tras caer de una altura de dos metros, lo que de acuerdo con su hijo, le causó sus actuales complicaciones de salud.
Sin embargo, aún se desconoce el diagnóstico exacto sobre el padecimiento o enfermedad que provocó su muerte.