¿Qué dijo ‘El Chapo’ Guzmán a la Marina después de ser capturado por segunda vez?

El sábado 22 de febrero de 2014, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán fue detenido por segunda ocasión en su estado natal de Sinaloa. Trece años antes, el narcotraficante se había escapado de la prisión de alta seguridad de Puente Grande, Jalisco, por lo que era uno de los fugitivos más buscados por las autoridades mexicanas.

Su arresto se efectuó a las 6:40 de la mañana en el condominio Miramar, ubicado en la ciudad de Mazatlán, donde también fue detenido Carlos Manuel Hoo Ramírez, identificado como secretario particular del entonces líder del Cártel de Sinaloa.

El operativo fue desplegado por elementos de la Marina y no hubo necesidad de realizar un solo disparo. “Reconozco la labor de las instituciones de seguridad del Estado mexicano, para lograr la aprehensión de Joaquín Guzmán Loera en Mazatlán”, informó en aquella ocasión el expresidente Enrique Peña Nieto en su cuenta de Twitter (ahora X).

Cerca de las 12:00 horas de ese mismo día, el capo sinaloense fue mostrado ante la prensa en el aeropuerto del entonces Distrito Federal (ahora Ciudad de México). En las fotografías que se tomaron en ese momento se observaba a ‘El Chapo’ Guzmán con un pantalón de mezclilla, cinturón negro y camisa blanca,

El trayecto de Mazatlán al Distrito Federal se hizo en un tiempo aproximado de 75 minutos. Durante el vuelo, Guzmán Loera fue sometido a un breve interrogatorio en el que dio a conocer detalles sobre su relación con otros capos de la droga.

Los elementos de la Marina escoltaban al sinaloense en el avión Learjet 60. Le preguntaron por qué cuando el 17 de febrero logró huir de las autoridades a través de un complejo sistemas de túneles en Culiacán optó por quedarse en Mazatlán, donde sabía que era fácil rastrear su ubicación.

La respuesta de ‘El Chapo’ fue breve pero clara: el motivo tenía que ver con las gemelas que tuvo con Emma Coronel, su actual pareja. “Ya me iba a ir pa’l monte, pero no había visto a mis niñas”, respondió Guzmán según una columna publicada en El Universal el 25 de febrero de 2014 por Carlos Loret de Mola.

En el condominio Miramar donde fue detenido ‘El Chapo’ también se encontraba Emma Coronel y sus dos hijas: Emaly y María Joaquina. De acuerdo con el periodista, en el departamento estaba la cuna de viaje de las gemelas, al lado de la habitación donde fue aprehendido el narcotraficante.

El resto de las preguntas realizadas tenían que ver con su relación con otros operadores criminales. Primero lo cuestionaron sobre Rafael Caro Quintero (fundador del extinto Cártel de Guadalajara que recuperó su libertad en agosto de 2013).

‘El Chapo’ reveló que se reunió con Quintero luego de que éste salió de la cárcel y fueron a la sierra de Sinaloa a comer juntos. Guzmán le aseguró a los elementos de la Marina que Rafael supuestamente ya no tenía interés en “regresar al negocio de la droga”, debido a su edad.

Años después se mostraría lo contrario. Quintero fue recapturado el 15 de julio de 2022 en Choix, Sinaloa. Las autoridades determinaron que durante el tiempo que estuvo libre encabezó una organización conocida como Cártel de Caborca.

El capo sinaloense también habló de sus rivales. A Los Caballeros Templarios los calificó como unos “rateros mugrosos” y dijo diferenciarse de ellos. Indicó que pese a ser un narcotraficante, él no robaba, secuestraba o extorsionaba.

Sobre Heriberto Lazcano Lazcano, alias ‘El Lazca’ —líder de Los Zetas— dijo que era uno de sus principales enemigos. “Pero era un caballero”, agregó ‘El Chapo’.

Asimismo, en el vuelo de Mazatlán al Distrito Federal Guzmán Loera aseguró que no era una persona rica como había señalado la revista Forbes, la cual en 2009 lo posicionó en el lugar 701 como los hombres más ricos del mundo.

También confesó que mandó a matar a Ramón Arellano Félix, pero se deslindó del asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, perpetrado en mayo de 1993.

A casi 10 años de su segunda captura, ‘El Chapo’ se encuentra en el penal de máxima seguridad de ADX Florence, en Estados Unidos, donde purga una condena perpetua por delitos relacionados con el narcotráfico.