La fuga de los dos principales líderes de organizaciones criminales de Ecuador empujó al país a una ola de violencia que obligó al presidente Daniel Noboa a reconocer que se encuentran en “estado de guerra”; Los Choneros y Los Lobos -grupos presuntamente vinculados al Cártel de Sinaloa y CJNG- desataron una serie de ataques contra policías, militares y sociedad civil que ya dejó más de una decena de muertos.
Ante esta ola de violencia, las Fuerzas Armadas y la Policía de Ecuador lanzaron en su cuenta de X (antes Twitter) @131Recompensas la lista con los nombres de los 20 criminales más buscados del país, más de la mitad con presuntos nexos con el Cártel de Sinaloa y Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
La lista la encabeza Fabricio Colón Pico, alias “Capitán o Comandante Pico”, líder de la organización criminal de Los Lobos, un grupo que nació en 2019 como una célula de Los Choneros pero que a partir del año 2021 encabezó una alianza contra sus antiguos aliados por el control del crimen organizado en Ecuador. A la unión se le conoció como Nueva Generación.
De acuerdo con investigaciones de InSight Crime y de la Evaluación Situacional del Narcotráfico en Ecuador, el nombre Nueva Generación a la alianza entre Los Lobos, Tiguerones y Chone Killers (Choneros Fatales) es un “guiño” a los nexos que tienen con el CJNG comandado por el michoacano Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho”.
Junto a “El Capitán Pico” aparecen los apodos de otros cinco integrantes de Los Lobos: “Comandante Vicente”, “Gordo Clemente”, “Santos”, “La Rata” y “JJ”, todos ellos señalados como los principales responsables de delitos como robos, extorsiones, tráfico de drogas y ser los responsables de las masacres en cárceles ecuatorianas que han cobrado la vida de más de 300 reos.
Los Lobos son la segunda agrupación criminal más grande de Ecuador -solo detrás de Los Choneros- con una fuerza de ocho mil hombres. De parte de Los Choneros, aparece el alias de “El Conejo” y -por separado- la ficha de búsqueda de José Adolfo Macías Villamar “El Fito”, el otro criminal que se escapó de la cárcel antes de estallar el terror en las calles y prisiones de Ecuador.
En la lista de los criminales más buscados también aparecen “El Cocoy” y “El Lagarto”, integrantes de Los Tiguerones; además de “El Calillo”, integrante de Los Choneros Fatales.
El Cártel de Sinaloa y CJNG en Ecuador
Investigaciones de la Administración para el Control de Drogas (DEA) reconocen que Ecuador es un corredor estratégico para el CJNG y Cártel de Sinaloa en sus rutas para el trasiego de cocaína vía aérea y marítima.
Por ello, la Evaluación Situacional del Narcotráfico advierte que desde el año 2020 el CJNG habría establecido contacto con organizaciones criminales locales a fin de facilitar el almacenaje de cocaína en regiones como Los Ríos, Santa Elena y Manabí a cambio de armas y drogas que le permitan a Los Lobos y sus aliados enfrentar la guerra que disputan contra Los Choneros.
El caso del Cártel de Sinaloa es similar, aunque sus contactos con personajes ecuatorianos se extienden hasta el año 2003 y a zonas como Sucumbíos, Pichincha, Manabí, Los Ríos, Santa Elena y Guayas; aunque los nexos entre Sinaloa y Ecuador quedaron evidenciados en 2009 con la detención del capitán del Ejército, Telmo Remigio Castro.
El militar fue acusado de facilitar el envío de cocaína de Colombia a México a través de puertos ecuatorianos utilizando lanchas rápidas y cargamentos escondidos en contenedores.
La alianza del Cártel de Sinaloa se mantuvo intacta hasta el asesinato de Remigio Castro en diciembre de 2019. Este hecho no solo marco el fin de una era y provocó el rompimiento de Los Choneros con Los Lobos y el inicio de la guerra; también generó dos nuevos líderes del narco de Ecuador identificados por el Departamento de Justicia de EEUU como Wilfredo Emilio Sánchez Farfán y César Emilio Montenegro Castillo, ambos siguieron la relación con Sinaloa.