Esta es la teoría de la felicidad que generó Einstein para tener una vida plena y feliz

Albert Einstein, célebre científico conocido por sus innovadores aportes a la física, no solo aportó nuevo conocimiento que cambio al mundo para siempre con su Teoría de la Relatividad sino que también creó su propia Teoría de la Felicidad con principios que aplicó a lo largo de su vida.

Una parte de estos pensamientos y forma de ver la vida pueden encontrarse en el libro Living Philosophies de donde se conoce que Einstein consideraba que la capacidad de sentir asombro ante los misterios del universo era uno de los principios en los que fundaba su Teoría de la Felicidad.

Y es que su filosofía personal reflejaba una incansable curiosidad y el deseo de contribuir al progreso social mediante la sabiduría y el entendimiento.

Para él, perder este sentido de maravilla equivalía a una muerte espiritual por lo que el asombro no solo era el motor de su carrera científica, sino que también moldeaba su manera de interpretar el mundo y su enfoque hacia la existencia.

En este sentido, Einstein ponía énfasis en valorar lo que distingue a cada individuo, rechazando la concepción de homogeneizar a las personas cual si fuesen entidades mecánicas pues para él era fundamental honrar las singularidades de cada uno y desafiar los estándares impuestos por la sociedad para alcanzar un auténtico avance humano.

Consideraba que los errores no debían verse como fracasos, sino como esenciales momentos de aprendizaje e interpretaba la vida, con sus fallos y desaciertos, como parte del camino hacia el progreso y la comprensión.

Einstein aceptaba sus errores como elementos constitutivos de su ser imperfecto y humano, extrayendo lecciones de ellos para seguir explorando nuevas teorías y realizando descubrimientos.

De esta manera, además de ser reconocido por sus contribuciones fundamentales a la física, también es recordado por su filosofía de vida que exhorta a la contribución al bienestar colectivo. El científico veía su labor investigativa como un camino para servir a la humanidad y a lo largo de su vida se mantuvo motivado por su deseo de ayudar a otros más que por la búsqueda de reconocimiento personal.

Einstein sostenía la idea de expandir la compasión y preocupación más allá de nuestros círculos cercanos, promoviendo un sentido de interconexión entre todos los seres. Su enfoque estaba en derribar las barreras del ego que nos separan de los demás, que según él era una ilusión.

Sus principios vitales incidieron en su accionar científico, pero también se extendieron a su perspectiva sobre cómo vivir de manera significativa, abarcando la admiración por el universo, la constante curiosidad y aprendizaje, y la conexión con la naturaleza.

• “La vida es una preparación para el futuro; y la mejor preparación para el futuro es vivir como si no hubiera ninguno”.
• “La búsqueda de la verdad y la belleza es una actividad que nos permite seguir siendo niños toda la vida”.
• “La medida de la inteligencia es la capacidad de cambiar”.
• “La creatividad es la inteligencia divirtiéndose”.
• “Un barco está siempre seguro en la orilla, pero ese no es el propósito para el que construye”.
• “La vida es como andar en bicicleta. Para mantener el equilibrio, debe mantenerse en movimiento”.
• “Sólo una vida vivida para los demás es una vida que vale la pena”.
• “No es posible mantener la paz usando la fuerza; que sólo se puede lograr mediante la comprensión”.
• Si quieres vivir una vida feliz, átala a una meta, no a personas o cosas”.
• “Donde hay una voluntad, hay un camino”.
• “Una vida humilde y tranquila trae más felicidad que la persecución del éxito y la constante inquietud que implica”.