En la mañana de este sábado, la comunidad musical mexicana se vistió de luto al conocer la triste noticia del fallecimiento de Amparo Rubín Tagle, reconocida compositora que dejó una huella imborrable en la escena artística nacional. La noticia fue confirmada por diversos medios y personalidades del medio, generando un profundo pesar entre sus colegas y admiradores.
A lo largo de su carrera, Amparo Rubín trabajó de cerca con figuras emblemáticas como Lupita D’Alessio y Manoella Torres, así como con influyentes agrupaciones como Flans y Timbiriche.
Su conexión especial con esta última se evidenció no solo en su calidad de autora de ‘Corro, vuelo, me acelero’, una de las canciones más icónicas de la agrupación juvenil, sino también en su estrecha relación con el cantante Erik Rubín.
María Amparo Rubín Tagle era tía del reconocido cantante, siendo hermana de José Ángel Rubín, padre de Erik.
¿Qué era Amparo Rubín de Erik Rubín?
La reconocida compositora mexicana María Amparo Rubín Tagle, tía del también cantante Erik Rubín, falleció este sábado dejando un legado importante en la música pop mexicana.
Fue la autora de temas emblemáticos para grupos juveniles como Timbiriche y Flans, y colaboró con artistas de la talla de Lupita D’Alessio y Manoella Torres.
Erik Rubín, conocido por su trayectoria en Timbiriche y su carrera como solista, expresó su dolor a través de un mensaje en Instagram el pasado 6 de enero. Acompañando la publicación con una foto de ambos, Rubín describió a Amparo como su “segunda madre” y “maestra de vida”, destacando su papel fundamental en su desarrollo artístico y personal. El cantante aseguró que el legado de Amparo perdurará a través de sus atemporales composiciones.
El impacto de Amparo Rubín en el ámbito musical no solo se refleja en sus composiciones, sino también en su papel crucial en el desarrollo profesional de su sobrino.
Ayudó a lanzar a Erik al estrellato cuando le facilitó la entrada al icónico grupo Timbiriche, y según compartió el cantante, su intención era que él compitiera con artistas de la época como Luis Miguel. Más allá de su labor como compositora, también trabajó en la representación artística, dejando una huella imborrable en el mundo del entretenimiento en México.
La travesía de Erik Rubín en la música comenzó al lado de su tía, quien lo acompañaba a audiciones y, de forma fortuita, les llevó a encontrarse con el mánager de Timbiriche en busca de un nuevo miembro.
Su talento y las circunstancias le abrieron las puertas al grupo, donde cantó y se integró de inmediato, marcando el inicio de una exitosa carrera. La influencia de Amparo Rubín en el pop mexicano perdura a través de las generaciones, y su rol como mentor de artistas sigue celebrándose hasta hoy.