Cynthia Klitbo se encontró en el ojo del huracán hace unos días cuando criticó a un grupo de personas de la tercera edad usando el servicio de silla de ruedas en un aeropuerto. Según la actriz de El privilegio de amar, muchos adultos mayores fingen tener una enfermedad y pedir esta facilidad para así evitar las largas filas que existen en estos lugares durante la temporada alta de gran afluencia.
Lo anterior sucedió cuando se encontraba en el aeropuerto de la ciudad de Nueva York en los Estados Unidos. La actriz vio a muchas personas usar una silla de ruedas, lo que detonó su molestia, misma que expresó en sus historias de Instagram.
“Por favor, si son viejitos no sean flojos, porque les va a pasar lo que a mi mamá, que por andar siempre en la silla de ruedas para pasar más rápido, el día que se rompió la cadera le dije: ‘ves querías silla de ruedas’”, dijo en su video.
Desde luego las redes sociales se le fueron encima. Fueron varios internautas los que consideraron sus comentarios como poco apropiados y poco sensibles ante la edad de muchas de estas personas. Usuarios argumentaron que sus familiares sí han ocupado el servicio de la silla de ruedas por necesidad.
Cynthia Klitbo defiende su postura
La actriz, sin embargo, no ha cambiado de opinión, y así lo manifestó durante una entrevista con el programa de televisión De Primera Mano. En el mismo explicó que ella se refería expresamente a todas aquellas personas que utilizan el servicio sin realmente necesitarlo.
“Estoy hablando de que a veces tú tienes un beneficio para determinada gente en un hospital o aeropuerto, y la gente mañosa lo usa”, dijo la actriz ante las cámaras del programa.
Quien diera vida a Tamara de la Colina en una famosa telenovela de Televisa, asegura que cuando las personas deben ser transportadas en silla de ruedas por un aeropuerto, generalmente los llevan directo hasta el avión y evitan largas esperas en los trámites, ya sea de documentación, o de migración.
“Mucha gente en temporada alta agarra una silla de ruedas, para entonces no hacer fila, te llevan hasta el avión, pasas rápido en migración”, explicó.
“A mí me da mucho coraje porque hay gente que está sana y lo utiliza”, continuó. “A mí no me importa que me acaben, pero de verdad yo lo creo”.
La actriz se mantiene firme y contundente en su opinión. Y es que asegura que simplemente en aquella ocasión, en la que tomó su celular y compartió su sentir en un video, vio que por lo menos 18 personas estaban ocupando el servicio, de las cuales sólo 4 realmente lo necesitaban.