La Fiscalía General de la República (FGR) informó que, mediante la Fiscalía Especializada en materia de Delincuencia Organizada (FEMDO) y la Fiscalía Especializada de Control Regional (FECOR), logró una sentencia condenatoria de 36 años y tres meses de prisión para Miguel Ortiz González, conocido como “El Tigre”, por su asociación con el grupo criminal Los Rojos y su participación en actividades de secuestro.
La condena se debió a la participación de Miguel Ortiz González en delitos graves como delincuencia organizada y secuestro agravado.
A raíz de su captura en octubre de 2009 por la entonces Secretaría de Seguridad Pública Federal, Ortiz González fue previamente sentenciado en 2013 y 2015.
No obstante, tras ordenarse la reposición del procedimiento, el Ministerio Público de la Federación (MPF) concluyó el proceso legal que derivó en la actual condena impuesta por el Juzgado Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales en la Ciudad de México.
La notoriedad de “El Tigre” en el mundo delictivo radica en su participación en múltiples secuestros, donde se destacaba por la violencia extrema ejercida contra las víctimas.
Actualmente, cumple su condena en el Centro Federal de Readaptación Social número 1 “Altiplano”, ubicado en Almoloya de Juárez, Estado de México. Este centro es conocido por albergar a reos de alta peligrosidad.
Los Rojos opera con especial fuerza en los estados de Guerrero, Morelos y Puebla; la organización criminal tiene sus origenes en el Cártel de los Beltrán Leyva, quienes a su vez formaban parte de la Federación o Alianza de Sangre, una unión entre el Cártel de Sinaloa y los hermanos Beltrán.
Algunos de estos integrantes se casaron o tuvieron algún tipo de relación con mujeres de los cárteles del narcotráfico, hasta que en el 2008 tuvieron una violenta separación.
Desde esa fecha, Los Beltrán Leyva fueron considerados como una célula criminal diferente al Cártel del Pacífico, pero al ser debilitada con detenciones o asesinatos de sus líderes surgieron Los Rojos.
De acuerdo con InSight Crime, los miembros de Los Rojos eran los operadores de Arturo Beltrán Leyva en los estados de Morelos y Guerrero. Los informes oficiales señalan que esta estructura criminal inició de la mano del ex gatillerro de los Beltrán, Crisoforo Rogelio Maldonado, quien fue abatido en 2012 en un hospital de la Ciudad de México.
El líder del cártel conocido como “El Carrete” fue capturado el 1 de agosto de 2019, vinculado a la desaparición de los 43 estudiantes normalistas en Iguala, Guerrero. Este suceso representó un nuevo golpe a la organización criminal que ha enfrentado varias detenciones de alto perfil en los últimos años.
Desde el arresto de Leonor Nava Romero, en septiembre de 2013, las fuerzas de seguridad han continuado desmantelando la estructura de Los Rojos. Las operaciones intensificadas resultaron en la aprehensión de María del Carmen Nava, esposa del fundador del cártel, en Querétaro, en 2014, y poco tiempo después, la captura de la conocida integrante Lizbeth Cantorán en Chilpancingo.
El cerco en contra del cártel comenzó en la capital de Guerrero, Chilpancingo, ampliándose a otros estados como Querétaro. Las detenciones son resultado de operativos coordinados por autoridades federales, quienes han fortalecido su lucha contra el crimen organizado en la región. Estos esfuerzos reflejan la estrategia del gobierno para combatir la violencia y la impunidad en zonas afectadas por el narcotráfico.