Novelas como La Tumba, La Panza del Tepozteco y Vida con mi viuda hicieron de José Agustín un referente de la literatura mexicana del siglo pasado. Sin embargo, el escritor, que formó parte del disruptivo movimiento ‘La Onda’, también dejó huella en el cine, faceta conocida principalmente por sus más fieles seguidores.
La tarde de este 16 de enero, su hijo José Agustín Ramírez confirmó la muerte del icono de la literatura de ‘La Onda’, mediante una sentida publicación en Facebook:
“Con profunda tristeza comunicamos el fallecimiento de José Agustín: esposo, padre, hermano, abuelo y escritor devoto de la literatura y la música, así como de sus lectores de cualquier edad. Quien fue un prolífico escritor, autor de novelas, cuentos, obras de teatro y guiones de cine. Guerrerense de corazón, autodidacta empedernido, amante de la comida y los placeres; jungiano, estudioso del I Ching, aficionado de la astrología e impulsor de todas las formas de contracultura. Se fue en paz, rodeado de su amorosa familia”, escribió.
Al vacío que ha generado el fallecimiento del escritor, ha seguido un interés por sus facetas artísticas, entre ellas, su rol como guionista y cineasta. A lo largo de más de cuatro décadas escribiendo historias para el séptimo arte, de la mente de José Agustín nacieron filmes que se convirtieron en obras de culto.
La influencia de José Agustín en el cine
En octubre de 2020, el Festival Internacional de Cine de Morelia reconoció las aportaciones al séptimo arte del escritor nacido en Guadalajara, Jalisco -aunque registrado en Acapulco, Guerrero. José Agustín estudió Letras Clásicas en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y dirección en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CCC) y composición dramática en el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).
Cuando tenía 18 años, comenzó a trabajar en La Tumba, su primera novela, la cual es considerada como piedra angular del movimiento literario “La Onda”. Pese a que su debut literario lo convirtió en un referente para los jóvenes, nunca perdió de vista hacer cine.
Su primer acercamiento al séptimo arte se dio en 1970, año en el que colaboró en el guion de la película Alguien nos quiere matar, del director Carlos Velo. La historia fue escrita en conjunto con Fernando Jesseau, Raúl Zenteno y el propio Velo. El filme tuvo la participación de una de las estrellas juveniles de la época: Angélica María, quien un año después actuó en el debut de José Agustín como director: Ya sé quién eres (te he estado observado).
En 1976, uno de sus guiones volvió a ser llevado a la pantalla grande. El cineasta Felipe Cazals dirigió El apando, historia escrita por José Revueltas y Agustín, considerada como una película de culto. Al margen de su carrera literaria, el escritor jalisciense siguió escribiendo guiones o adaptando historias. En 1979, trabajó con el director Miguel Littin en el guion de La viuda de Montiel, novela del escritor colombiano Gabriel García Márquez.
De ‘Ciudad de Ciegos’ a ‘Me estás matando, Susana’: su huella en el cine
La década de los años 80 fue clave su faceta como guionista y director. En 1985 tuvo una breve actuación en la película Deveras me atrapaste, de Gerardo Pardo. Un año después, colaboró con Alberto Cortés para adaptar al cine Amor a la vuelta de la esquina. El proyecto fue protagonizado por Gabriela Roel, Alonso Echánove, Leonor Llausás y Juan Carlos Colombo.
En 1991, José Agustín volvió a trabajar con Cortés en Ciudad de ciegos, cuyo guion fue escrito en conjunto con Hermann Bellinghaussen, Marcela Fuentes-Berain, Paz Alicia Garciadiego, Silvia Tomasa Rivera y el propio Cortés. La narrativa del filme, que cuenta 10 historias que coinciden en un departamento de la colonia Condesa, marcó un hito en la industria al mostrar una forma diferente de contar historias.
Después de ese proyecto, José Agustín se enfocó en su rol como escritor y periodista. Colaboró para distintas publicaciones y fue parte de la fundación de un diario de circulación nacional. Incluso tuvo una columna en la revista contracultural La Mosca en la Pared, dirigida por Hugo García Michel.
En 2011, volvió a trabajar para un proyecto cinematográfico. Ese año adaptó la novela Abolición de la propiedad, filme que fue dirigido por Jesús Magaña Vázquez y protagonizado por Humberto Bustos y Aislinn Derbez. Cinco años más tarde llegó a las salas de cine Me estás matando, Susana, película protagonizada por Gael García Bernal, que se basa en la novela Ciudades desiertas. Este largometraje, dirigido por Roberto Schneider, marcó su última participación en el séptimo arte.