Así se veía Rossy Mendoza, “la vedette del cuerpo perfecto”, cuando era una estrella del cine mexicano

Hoy 29 de diciembre se anunció la lamentable noticia de que Rossy Mendoza, icónica actriz que resaltó por su trabajo en el cine de ficheras, murió a los 80 años tras luchar en contras de diversas dolencias que la llevaron varias veces al hospital. La actriz tenía afectaciones cardiacas en el corazón y vivía con una neurolupus que había afectado agresivamente su calidad de vida.

Su hija, Silvana, estuvo al pie del cañón desde que la famosa vedette cayó en cama y reportó el avance de la salud de su madre en medios de comunicación como el programa De Primera Mano, conducido por el comunicador Gustavo Adolfo Infante.

Fue en dicho programa donde contó que Rossy Mendoza, lamentablemente, comenzó a perder vitalidad luego de una fuerte caída que sufrió en su casa y que la obligó a recibir una prótesis pues se rompió la cadera. La actriz desde entonces no mejoró y su salud fue deteriorándose.

Derivado de la caída, que ocurrió por la fragilidad de sus huesos producto del ataque de la lupus en su cuerpo, la vedette tuvo más y más complicaciones. Por ejemplo, sufrió de dolorosas llagas que su hija cuidó con detenimiento y que llegaron a su vida por el estado de postración en el que se encontraba.

Una de las características de la vedette fue su indudable belleza, cualidad que la convirtió en un ícono que llamaba la atención principalmente de los caballeros. Su envidiable figura era digna de admiración y la actriz supo resaltarlo durante toda su carrera.

También fue conocida como “La cintura más breve” o simplemente como “El cuerpo”. Incluso, artistas de la música como Pérez Prado, conocido cantante cubano, le compusieron mambos en honor de su atractivo. El mambo, género musical que la vedette bailó en más de una ocasión, le fue enseñado por su amigo Resortes.

Y es que la carrera de Rossy Mendoza fue espectacular. Su faceta como vedette la llevó a ser una de las más importantes de la industria del espectáculo de nuestro país, colaborando con grandes del cine y la televisión como El Santo y Capulina. También tuvo gran presencia en el teatro, apareciendo en icónicos escenarios como el Teatro Blanquita.

Rossy Mendoza participó en películas como Capulina contra los vampiros, El Santo contra los secuestradores, California Dancing Club, Dulcemente morirás por amor, Los gatos de las azoteas, Juana la Cantinera, El día de los albañiles y Los Verduleros.

También apareció en el documental Bellas de Noche junto a Olga Breeskin y Lyn May, donde cuenta cómo su belleza la llevó a lo más alto de la industria del entretenimiento.

La Asociación Nacional de Actores (ANDA) estuvo al pendiente siempre de la salud de la actriz y apoyó a la familia en más de una ocasión con los costosos tratamientos a los que Rossy tuvo que someterse; no obstante, este dinero no siempre alcanzaba, por lo que su hija Silvana muchas veces pidió ayuda y donaciones para su mamá.

Lamentablemente, la icónica actriz, compañera de vida de otras vedettes como Olga Breeskin y Lyn May, perdió la vida luego de que los doctores le dieran un pronóstico fatal, se comenzaran con los cuidados paliativos pertinentes y pasara la mayor parte de sus últimos días sedada para aguantar los fuertes dolores.

Incluso, sacerdotes se dieron cita en la sala de hospital donde descansaba la actriz para darle su bendición y hacer las ceremonias precisas para los enfermos. La actriz se fue sin olvidar su fantástica carrera, pues su hija Silvana y el resto de su familia se encargó de recordársela cuando estaba despierta.