‘La Kena’ y los otros narcos que vivieron en San Pedro Garza García, el municipio más rico de México

La detención de José Alberto García Vilano, alias “La Kena”, habría ocurrido al interior de un centro comercial ubicado en San Pedro Garza García, Nuevo León

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40920044. Monterrey.- El Cerro de la Silla, ícono de  Monterrey, testigo mudo de 418 años de la ciudad de Monterrey. 
NOTIMEX/FOTO/JUAN CARLOS PÉREZ/FRE/HUM
40920044. Monterrey.- El Cerro de la Silla, ícono de Monterrey, testigo mudo de 418 años de la ciudad de Monterrey. NOTIMEX/FOTO/JUAN CARLOS PÉREZ/FRE/HUM

La detención de José Alberto García Vilano, alias “La Kena”, al interior de un centro comercial ubicado en San Pedro Garza García, el municipio más rico de México nos recuerda el nivel de impunidad y “libertad” bajo el que vivían otros líderes criminales que decidieron mudarse a la opulencia que garantizaba el municipio de Nuevo León.

De acuerdo con la investigación del periodista Diego Enrique Osorno plasmada en su libro El Cártel de Sinaloa, narcos de la talla de Juan José Esparragoza Moreno “El Azul”, Juan García Ábrego, Benjamín Arellano Félix, Osiel Cárdenas Guillén y Amado Carrillo Fuentes “El Señor de los Cielos”, vivieron en San Pedro Garza García.

Datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) refieren que San Pedro Garza García no sólo es el municipio más rico de México, también el más seguro, pues 9 de cada 10 habitantes tienen una buena percepción en materia de seguridad.

Lo anterior a pesar de los múltiples narcos que han sido detenidos en sus límites territoriales, siendo uno de ellos Juan García Ábrego, el exlíder del Cártel del Golfo que se presume caminaba sin escoltas -así la seguridad de San Pedro Garza García- por las calles del municipio y por la Macroplaza de Monterrey. Hasta que un día de 1996 lo detuvieron y lo extraditaron a Estados Unidos.

Benjamín Arellano Félix y sus hermanos, líderes del Cártel de Tijuana, tenían al menos tres mansiones en el municipio más rico de México -según la agencia EFE, el más rico de América Latina-; información del Semanario Zeta Tijuana a principios del nuevo milenio la familia de Benjamín hizo su vida con “normalidad” al menos un año en algunas de las colonias más exclusivas de San Pedro Garza García.

En esta imagen, Ábrego y 'El Mochomo' aparecen acompañados de otros reos. (Reddit)
En esta imagen, Ábrego y 'El Mochomo' aparecen acompañados de otros reos. (Reddit)

Narcos en San Pedro Garza García

En la época de esplendor del Cártel de los Beltrán Leyva el municipio más rico de México sirvió como residencia de Fausto Isidro Meza Flores “Chapo Isidro”, considerado la actual cabeza de la organización criminal creada por los hermanos Alfredo, Arturo y Héctor junto al Cártel de Sinaloa.

“El Gato”, José Rodolfo Villarreal Hernández -detenido en enero pasado- también era considerado como uno de los líderes de los Beltrán Leyva y principales generadores de violencia en Nuevo León, por quien el FBI ofrecía un millón de dólares por su captura y lo incluyó en la lista de los 10 más buscados.

La lista de los operadores de los Beltrán Leyva que se asentaron en San Pedro Garza García se extiende a nombres como Héctor N, “La Burra”; Alberto N, “El Chico Malo; Omar Ibarra, Carlos Enrique N, “El Z-12″ y Rachid Alberto.

Felipe de Jesús Mendívil (Cártel de Juárez); Omar N, El Z-42 (Zetas), Ernesto Villegas (Zetas), Juan Manuel Rodríguez (Cártel del Golfo) y Carlos Arturo Jiménez Encinas (Zetas), fueron otros de los narcos detenidos entre 2001 y 2022 en colonias del municipio neoleonés.

De los nombres anteriores sobresale el de Omar “N” (Treviño Morales), el sanguinario ex líder de Los Zetas detenido en 2015 en una lujosa mansión de la colonia Villa Colatina de San Pedro Garza García.

El ex lider de Los Zetas se movía con un pequeño cuerpo de seguridad -por el municipio más seguro del país- para pasar desapercibido y no llamar la atención de las autoridades. “El Z-42″ es señalado por ordenar la masacre de 72 migrantes en San Fernando, Tamaulipas, en 2010.

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